En el 28º aniversario de la primera huelga general de la clase trabajadora que tuvo lugar el 3 de enero de 1991, miembros de Abogados por la Democracia (DIH) han visitado a las trabajadoras de Formar que fueron despedidas por estar sindicalizadas, y quienes llevan resistiendo 234 días frente a la fábrica en Gebze.

Las abogadas de DIH, recibidas con entusiasmo, han emitido un comunicado tras su encuentro con las trabajadoras. “Flomar está cometiendo un crimen, las organización sindical es un derecho. Las trabajadoras de Flomar no están solas”, podía leerse en una pancarta mientras la abogada Yildiz Imrek leía el comunicado en nombre de DIH.

Imrek ha subrayado que los derechos democráticos ganados por los trabajadores tras innumerables luchas se ven hoy amenazados.

A principios de los 90, ha explicado, había una tasa del 22% de trabajadores sindicados, mientras que hoy se encuentra en el 6%.

Imrek ha recordado las masacres de los trabajadores en la mina de Soma, en Ermenek, en Torunlar, en el 3er aeropuerto de Estambul, y ha añadido que las responsabilidades de los jefes en estas muertes son depuradas. Sin embargo, los trabajadores que reclaman sus derechos son detenidos y enviados a prisión.

Imrek ha recordado que el gobierno turco ha prohibido las huelgas y ha obstruido los contratos colectivos explotando el Estado de Emergencia.

Refiriéndose a la Constitución, Imrek ha remarcado que los sindicatos, las negociaciones colectivas y el derecho a huelga están garantizados, y ha agregado que el jefe de Flormar ha actuado de forma ilegal y cometido un crimen.