El ejército alemán reanuda el entrenamiento de las fuerzas kurdas de Peshmerga en Hewlêr (Erbil). La base de la decisión, que fue anunciada por el Comando de Operaciones del ejército alemán, fue una decisión conjunta de la sede de la coalición contra el ISIS y los socios multinacionales.

La misión de entrenamiento fue interrumpida debido al conflicto entre EE. UU. e Irán después de que EE. UU. había matado al general iraní Qassem Soleimani y al comandante Hashd-al-Shaabi Abu Mahdi al-Muhandis en un ataque con misiles selectivos en Bagdad en la noche del 3 de enero. En respuesta, Irán disparó misiles contra las bases utilizadas por las tropas estadounidenses en Irak.

Alrededor de 90 soldados alemanes están estacionados en Hewlêr. El ejército alemán ofrece dos cursos de entrenamiento para instructores Peshmerga allí. Desde las 6.00 a.m., hora alemana, las operaciones ya se han reanudado. Sin embargo, en el centro de Irak, la capacitación seguirá suspendida por el momento. Las tropas alemanas estacionadas en Bagdad y Taji fueron trasladadas a Jordania a principios de enero por razones de seguridad.

Después del asesinato del general Soleimani, el parlamento iraquí había exigido la retirada de todas las tropas extranjeras del país. En una resolución en este sentido, pidió al gobierno de Bagdad que retire su solicitud de asistencia en la lucha contra el ISIS e inicie la retirada de todas las tropas.

Sin embargo, según el ministro de Relaciones Exteriores alemán, Heiko Maas (SPD), el primer ministro dimitido, pero aún provisionalmente en el cargo, Adel Abdul al-Mahdi se pronunció a favor de continuar la misión de entrenamiento militar alemán. Esto fue confirmado por al-Mahdi a representantes del gobierno federal, había dicho el político del SPD en el Parlamento alemán. La ministra de Defensa, Annegret Kramp-Karrenbauer (CDU), analizó las posibilidades de continuar la misión internacional contra el ISIS en Bagdad.

El ejército alemán ya había reanudado sus vuelos de reconocimiento en la región. Los aviones de tornado siguen en servicio desde la base aérea jordana al-Asrak hasta finales de marzo. Están listos para rastrear escondites del ISIS en Siria e Irak.