El 20 de julio de 2015, 33 personas murieron y 104 resultaron heridas en un ataque bomba contra miembros de la Federación de Asociaciones de Jóvenes Socialistas (SGDF) en la ciudad fronteriza de Suruç, en la provincia de Urfa.

Los jóvenes estaban realizando una campaña para llevar a los niños de Kobane algunos juguetes, así como también solidaridad con la gente de Kobane que se refugió en la provincia.

Los mercenarios del ISIS respaldados por el estado turco llevaron a cabo el ataque mortal. En la víspera del aniversario de la masacre, el gobernador de Urfa prohibió todas las acciones y actividades en la ciudad.

La declaración emitida por la Gobernación dijo: "(...) todo tipo de reuniones, marchas, comunicados de prensa, mítines, tiendas de campaña, stands y actividades al aire libre similares, que se pueden realizar en áreas abiertas, están prohibidas desde las 8 a.m. del 18 de julio de 2019 hasta las 11:59 pm del 25 de julio de 2019. La prohibición alcanza los límites geográficos de Şanlıurfa, incluidos los centros de las ciudades y los distritos".