El Partido Rojo noruego condena los intentos de ilegalizar el HDP
El Partido Rojo de Noruega condena los intentos de Turquía de ilegalizar el HDP.
El Partido Rojo de Noruega condena los intentos de Turquía de ilegalizar el HDP.
Bjørnar Moxnes, líder del Partido Rojo y diputado, Seher Aydar, representante adjunto, y Marie Sørhaug, responsable de asuntos internacionales, han emitido una declaración para condenar los intentos de Turquía de ilegalizar el HDP.
La declaración dice lo siguiente: “A pesar de que el HDP es el tercer partido más grande de Turquía, la maquinaria de poder de Erdogan ha dejado de lado la voluntad del pueblo y ha iniciado un proceso para ilegalizar el partido. Desde que alcanzaron el elevado umbral electoral del 10%, el HDP ha sido objeto de ataques masivos. Varios representantes electos del HDP ya están de hecho en prisión. Los co-alcaldes elegidos en las zonas kurdas han sido destituidos y sustituidos por personas nombradas a dedo por el gobierno de Erdogan. Miles de activistas y políticos del HDP han sido detenidos y muchos son ahora presos políticos. El cierre de partidos políticos, especialmente los pro-kurdos, no es un fenómeno nuevo en Turquía. Desde la década de 1990, 6 partidos pro-kurdos han sido ilegalizados. Ahora le ha llegado la hora al HDP.
Erdogan y su coalición de fundamentalistas religiosos y ultranacionalistas han destruido las ya de por sí débiles instituciones democráticas. Los principios jurídicos básicos han sido socavados:
En Noruega, varias organizaciones jurídicas han afirmado en una declaración conjunta que Turquía ya no puede considerarse un verdadero Estado de derecho.
Los medios de comunicación críticos con el gobierno han sido clausurados y sus periodistas están encarcelados. Esto es lo que dice Reporteros sin Fronteras sobre el estado de la libertad de expresión en Turquía: “Criticar a las autoridades, estar empleado en un medio de comunicación ‘sospechoso’, contactar con una fuente sensible o incluso simplemente utilizar servicios de mensajería encriptados, es la base para encarcelar a los periodistas por terrorismo en Turquía”.
Como el régimen también controla la mayor parte de la información que sale de Turquía, es importante que la comunidad internacional siga de cerca lo que ocurre allí.
Ahora, el Estado turco ilegalizará el HDP y privará a cientos de sus políticos del derecho a ser elegidos o a dedicarse a la política. Independientemente de lo que uno piense del proyecto político del HDP, todos los que se preocupan por la democracia y la paz deberían protestar por su ilegalización.
El HDP hizo un claro llamamiento a la acción para todos nosotros: ‘La opresión del gobierno sobre el HDP y otras fuerzas democráticas seguramente se intensificará en los próximos meses, y nuestra lucha también. Por ello, invitamos una vez más a la comunidad democrática internacional a adoptar una postura de principios, a reforzar aún más la solidaridad internacional y a actuar contra estas lamentables maniobras políticas del gobierno del AKP para prohibir el HDP y negar la voluntad de millones de personas’.
La represión de Erdogan contra los kurdos y la oposición en Turquía es completamente inaceptable. La ministra de Asuntos Exteriores, Søreide, debe seguir el ejemplo de su colega sueca y condenar el trato de Turquía hacia al HDP y los ataques a la democracia”.