El Tribunal Permanente de los Pueblos denuncia violaciones en cárceles secretas
El segundo día de la sesión del Tribunal Permanente de los Pueblos Rojava vs Turquía continuó con muchas presentaciones.
El segundo día de la sesión del Tribunal Permanente de los Pueblos Rojava vs Turquía continuó con muchas presentaciones.
El segundo día de la sesión del Tribunal Permanente de los Pueblos Rojava vs Turquía continuó con la presentación “Violación y violencia sexual en prisiones secretas: métodos de tortura y guerra” a cargo de la investigadora del equipo de la fiscalía, Anni Pues.
Pues, profesora titular de Derecho Internacional en la Universidad de Glasgow, es también abogada y ha actuado como asesora en las Cámaras Especializadas de Kosovo, la Corte Penal Internacional y el Tribunal de Justicia de la Unión Europea. Al abrir el caso, dijo: “La presentación en el caso de Nadia Hassan Suleiman, Lonjin Abdo y otros, incluye acusaciones de detención arbitraria, tortura, violación y otras formas de violencia sexual como crímenes de guerra. Estos actos son crímenes de guerra cometidos durante un conflicto armado no internacional según el derecho internacional consuetudinario. Turquía también está acusada del crimen de lesa humanidad de desaparición forzada en este caso. Las experiencias de Nadia Hassan Suleiman y Lonjin Abdo son representativas del sufrimiento de muchas mujeres. Sus testimonios evidencian el uso sistemático de la violación y la violencia sexual grave como arma de guerra y como método de tortura”.
Pues añadió que “Nadia Hassan Suleiman fue objeto de desaparición forzada por parte de las autoridades turcas entre el 2 de agosto de 2018 y diciembre de 2020. Fue secuestrada y llevada a la sede de la agencia de inteligencia turca MIT (Millî İstihbarat Teşkilâtı). Nadie fue notificado de su paradero. Tras su captura, fue torturada y violada en múltiples ocasiones. Durante su detención en varios centros penitenciarios, estuvo retenida en condiciones inhumanas, privada de comida y agua, sometida a una grave violencia física y soportó tortura psicológica. Lonjin Abdo corrió la misma suerte y estuvo detenido durante algún tiempo junto con Nadia Hassan Suleiman. Soportó violaciones casi a diario como parte de su cautiverio”.
Borrado cultural e histórico
El investigador del equipo de la fiscalía, Sócrates Tziazas, presentó el caso sobre la eliminación cultural e histórica. Tziazas consultó al testigo experto, el profesor Odisseas Christou, sobre violaciones como la profanación de cementerios y la destrucción y el saqueo de sitios arqueológicos, como el templo de Ain Dara, en el sur de Afrín, en enero de 2018. El templo data del primer milenio antes de Cristo y fue completamente destruido por los bombardeos turcos.
Tziazas dijo que “Afrin era una de las regiones de patrimonio cultural más raras del mundo" en términos de su posesión de una gran cantidad de sitios arqueológicos e históricos distribuidos en (366) aldeas en la región de Afrin y que datan de diferentes épocas históricas.
Desde 2018, cuando tuvo lugar la operación “Rama de olivo”, varios sitios culturales, religiosos y arqueológicos han sido víctimas de profanación, vandalismo, saqueo y destrucción.
Bombardeo a la escuela Shemoka
El investigador de la Fiscalía, Rengin Ergül, presentó ante el tribunal otro crimen horrendo: el bombardeo de la escuela Shemoka. La tarde del 18 de agosto de 2022, una escuela civil de la Administración Autónoma del Norte y el Este de Siria (AANES) fue el objetivo de un devastador ataque aéreo mientras los estudiantes jugaban afuera.
El abogado Ergul dijo: “La escuela había sido creada para brindar educación a los niños desplazados, ofreciendo materias académicas y actividades recreativas como deportes y música. La escuela era un entorno de aprendizaje neutral y no militarizado. La explosión causada por el ataque provocó una destrucción significativa, con varios estudiantes muertos y muchos otros heridos”.
Entre quienes perdieron la vida se encontraban Diana Elo, Zozan Zedan, Dilan Ahmed, Ranya Abdulrezaq y Silava. Las y los sobrevivientes, entre ellos los estudiantes Rinde Bekir y Novîn Rîyade, compartieron relatos del ataque mediante mensajes de video, en los que enfatizaron la falta de apoyo inmediato de las organizaciones internacionales.
Bombardeo a la imprenta Simav
El último caso presentado fue el del atentado con bomba contra la imprenta Simav en Qamishlo el 25 de diciembre de 2023. El investigador del equipo de la fiscalía, Florian Bohsung, dijo que: “El ataque aéreo se llevó a cabo sin previo aviso, matando a 7 civiles y causando grandes daños a la imprenta. Tras el ataque, el Ministerio de Defensa Nacional de Turquía afirmó que la operación tenía como objetivo a terroristas e instalaciones del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK). Sin embargo, según las pruebas reunidas, las víctimas no tenían ninguna afiliación con el PKK ni con ningún otro grupo político o militar. Del mismo modo, la imprenta, que empleaba a 28 personas en ese momento, se utilizaba para fines civiles, imprimiendo libros escolares, periódicos, revistas y folletos. Era de propiedad familiar y no tenía ninguna afiliación con el PKK ni con ningún otro grupo político o militar”.