La Voz de los Estados Unidos informó que el martes Lindsey Graham, uno de los 45 senadores republicanos que asistieron a la reunión de Sanciones a Turquía en la Casa Blanca, pidió al presidente Trump que exhorte al ministro de Relaciones Exteriores de Turquía, Mevlut Cavusoglu, a abstenerse de activar el sistema de misiles S-400, para evitar sanciones estadounidenses. 

La misma fuente dijo que el senador Graham llamó al ministro Cavusoglu el miércoles. 

Según los informes, Graham se encuentra entre el grupo de senadores que piensan que las sanciones a Turquía no son necesarias si los sistemas S-400 no están activados, e instó al ministro a convencer a Turquía. Graham dijo: "Si el sistema está activado, no tenemos otra opción. Aplicra sanciones es claro", y agregó que la activación de los sistemas S-400 "conducirá a un camino oscuro para las relaciones de Estados Unidos con el aliado de la OTAN Turquía".

Reuters informó que el Congreso es cauteloso con respecto a las sanciones, y el asunto no es una prioridad por ahora. Las agencias de noticias occidentales dicen que las sanciones contra Turquía no son probables hasta el 9 de septiembre cuando el Congreso regrese de las vacaciones. 

El portavoz del Departamento de Estado de EE. UU., Morgan Ortagus, realizó una conferencia de prensa y dijo que EE. UU. comenzó el proceso de retirar a Turquía del programa F-35: “Los pasos dados hasta la fecha son importantes. Es un paso serio imponer sanciones contra un aliado de la OTAN".

Ortagus expresó también que la Ley contra los adversarios de Estados Unidos a través de las sanciones (CAATSA) no estipula un plazo para la imposición de sanciones: "Seguimos expresando nuestras preocupaciones en las reuniones con los turcos. No hay nada nuevo que anunciar con respecto a las sanciones de hoy".