Estados Unidos ve que el estado turco está teniendo dificultades para cumplir sus promesas a Rusia en Idlib. Están permitiendo que Turquía ataque a algunas regiones de Rojava para arrancar el país desde el eje Rusia-Irán, lo que da más peso a la sospecha de que están construyendo una nueva jugada.

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, al ver en rojo su animosidad contra los kurdos, amenazó con atacar Rojava-Siria del Norte ayer, en una repetición de sus comentarios antes de la invasión de Afrin que "Si estamos de acuerdo con los Estados Unidos, llevaremos a cabo una operación contra Manbij", y "si estamos de acuerdo con Rusia, llevaremos a cabo una operación contra Afrin".

El estado turco ha estado bailando en la cuerda estadounidense para masacrar y exiliar a los kurdos en Rojava un día y la cuerda de Rusia al siguiente en los últimos 3 años. Siguen una política dedicada a otorgar todo lo que tienen y esto ha estado funcionando para ellos hasta cierto punto.

Las amenazas de invasión de Erdogan de ayer no deben ser ignoradas. La declaración de movilización de la Administración Autónoma de Siria del Norte y del Este muestra el alcance de la amenaza. Viendo lo que esta estructura fascista cegada por la animosidad contra los kurdos puede hacer y lo que pretende hacer, sería erróneo considerar que esto es solo una narrativa orientada hacia la elección.

Las amenazas de invasión de Erdogan se produjeron inmediatamente después de que el Representante Especial de los Estados Unidos para Siria, James Jeffrey, visitara Turquía y la serie de reuniones del subsecretario del MIT Hakan Fidan en los Estados Unidos y se reuniera con Erdogan a su regreso.

La declaración del jefe de personal de los Estados Unidos, Joseph Dunford, de que están capacitando a entre 35 y 40 mil efectivos de las fuerzas locales para garantizar la estabilidad en el este de Siria recuerda el correo electrónico de la Oficina de Relaciones Públicas de la Coalición encabezada por Estados Unidos a Reuters, que indica que formarán un personal de 30.000 agentes. Las fuerzas de seguridad fronteriza en el norte y el este de Siria ponen a Estados Unidos bajo sospecha.

En este punto, la pregunta de qué es lo que realmente quiere hacer Estados Unidos permanece sin respuesta. A medida que la guerra contra el ISIS llega a su fin, como se lleva despejado el 50% de Hajin, el último lugar que ocupa el ISIS, queda claro lo que quiere hacer el estado turco, pero los objetivos de los EEUU plantean serias dudas.

Antes de que Jeffrey visitara Turquía, dijo que "es hora de desconectar Astana", lo que demuestra que EEUU quiere alejar al estado turco de la influencia de Rusia e Irán y ha lanzado esfuerzos para hacerlo. Pero la pregunta es, ¿a cambio de qué?.

Estados Unidos ve que el estado turco está teniendo dificultades para cumplir sus promesas a Rusia en Idlib. Están permitiendo que Turquía ataque a algunas regiones de Rojava para arrancar el país desde el eje Rusia-Irán, lo que da más peso a la sospecha de que están construyendo una nueva jugada.

Rusia, por otro lado, pensando que todavía tienen las riendas de Erdogan en la mano, continúa utilizando los comentarios antiamericanos de Erdogan en la triple cumbre celebrada en Teherán en septiembre, en lugar de centrarse en Idlib.

Pero el estado turco finalmente elegirá a Estados Unidos sobre Rusia. Aún no está del todo claro, pero el estado turco quiere involucrar a EE. UU. en la línea Jarablus-Azaz-Bab-Afrin e Idlib, en una patada proverbial a Rusia, e incluir estas regiones "bajo el paraguas de la OTAN", implementando la "Fórmula de Hatay" allí también.

Hay indicios de que Hakan Fidan tenía un archivo para "Reforzar la asociación estratégica con los Estados Unidos en Siria y trabajar juntos hacia objetivos comunes" durante sus visitas de hecharse y rascar la barriga en los Estados Unidos.

Lo que esto significa en el terreno es que harán de EEUU un socio en las áreas anexas de Siria, garantizando el derecho de ingresar al noreste de Siria por sí mismos, pero primero deben disolver el sistema democrático formado en la región por los kurdos y otros pueblos

En otras palabras, quieren desarrollar la política de “tomar Alepo, dar a Bab” y “tomar Ghouta del Este, dar a Afrin” que tenían con Rusia en “Seamos socios en Idlib, incluyamos al este del Eufrates, convierta la región en un Jihadistán, divida a Siria, golpee a Rusia con fuerza, detenga la política de la media luna chiíta de Irán".

No se ha expresado oficialmente, y un juego amañado todavía está en su lugar, pero se afirma que ha habido reuniones intensas con los EEUU para este fin. Mirar a Erdogan que comienza a amenazar a Rojava y el norte de Siria justo después de la reunión de Hakan Fidan con Erdogan, a su regreso de EEUU muestra la gravedad de la situación.

Otro punto es que EEUU ha estado trabajando para una nueva estructura bajo su control en el norte y el este de Siria durante mucho tiempo. Esto es comprensible hasta cierto punto, pero a medida que la lucha contra ISIS se acerca a su fin, es inaceptable mantener negociaciones sucias sobre los kurdos.

Puede ser demasiado pronto para decir que todo el gobierno y los militares en los EEUU están involucrados en tal negociación. Pero hay información de que de hecho se están llevando a cabo negociaciones serias y sucias.

No hay duda de que tal negociación dañaría a los Estados Unidos y al futuro y la confiabilidad de sus políticas regionales. Una negociación tan sucia sobre los kurdos, la gente más oprimida de Medio Oriente, creará grandes problemas de confianza en todo el mundo para los Estados Unidos.

Los kurdos, que han estado sujetos a la negación, la asimilación y la aniquilación por parte de los estados nación de la región durante siglos y han estado librando la guerra más efectiva contra la perdición del ISIS mundial durante los últimos 5 años, no aceptarán tal traición y se resistirán hasta el fin.

Y, el deseo de una camarilla dentro del gobierno de EEUU para organizar nuevos escenarios también pone en peligro la estabilidad que han sido nutridas por los kurdos y los pueblos de la región en el norte y el este de Siria, con un gran precio pagado. Así corren la posibilidad de extender la guerra siria a un panorama más amplio, por más tiempo, así como a dañar la estabilidad de varios países del Medio Oriente.

Mientras estábamos escribiendo sobre las amenazas de Turquía, el Pentágono emitió una declaración débil contra las amenazas de Erdogan. La declaración del Pentágono dijo: "La intervención militar contra los lugares donde el personal militar de EEUU puede estar presente en el noreste de Siria será motivo de gran preocupación. Tales actos son inaceptables".

Esta es una declaración débil, porque Erdogan había dicho en su declaración que "las bases y los militares de los Estados Unidos no serán atacados". Esta declaración tiene la frase abierta "donde el personal militar de los EEUU puede estar presente", y considerar las dos declaraciones juntas aún deja muchas dudas.

Destacando una vez más que el estado turco que participa en una invasión "a pesar de los EEUU" no encaja dentro de la razón, si observamos una vez más a dónde y a qué se dirigirá el estado turco de acuerdo con la información a la mano, se llega a lo siguiente:

Los informes dicen que el estado turco está apuntando principalmente a Girê Spî y Serekaniye. Quieren formar un "cinturón turco" en lugar de un "cinturón árabe" aquí, y ver cómo se desarrolla la coyuntura para el resto de las tierras después de crear una división entre Kobanê y Cizire.

Una segunda opinión es que presionarán a la línea Gire Spi y Serekaniye y convencerán a los Estados Unidos para que les entreguen a Manbij (así como a las tierras de Shexler a Qereqozax). Mirando el discurso de Erdogan ayer, parece que están contentos con esta opción "por ahora".

No está del todo claro si el posible ataque de invasión seguirá siendo "local" o será "extenso", pero la opinión predominante es que la resistencia debe estar presente en "todas las áreas, todos los frentes, con todos los métodos y sin límite de tiempo".

En resumen, es hora de una resistencia ilimitada contra el colonialismo turco que no conoce límites en su animosidad contra los kurdos.