La Junta Ejecutiva Central del HDP ha emitido un comunicado por escrito en el que subraya que “el concepto y los métodos de resolución de problemas utilizados por el gobierno, basados en la guerra y la violencia, son causantes de la actual crisis que atraviesa el país. Pese a ello”, continúa el comunicado, “el gobierno del AKP insiste en las políticas de guerra y profundiza la crisis”.

El HDP ha hecho un llamamiento al poder gobernante para que ponga fin a estas políticas erróneas y ha añadido que si la guerra no se resuelve, el país y la sociedad se quedarán sin futuro: las pérdidas humanas y de recursos siguen incrementándose día a día. “La guerra es una política equivocada, e insistir en una política equivocada es dejar al país y a la sociedad sin futuro. La cuestión kurda es la prueba más obvia y dolorosa de ello. Las políticas fallidas en relación a Siria, también son un indicador”.

Pese a todo esto, añade el HDP, “el poder gobernante sigue librando operaciones militares como ha venido haciendo desde 1983. El ataque contra el Gobierno Regional del Kurdistán con las tropas desplegadas en tierra, los helicópteros y toda la parafernalia de guerra va en contra de las leyes internacionales. Es una clara violación de la soberanía de un país vecino. Pero lo más importante: es un intento de agravar los problemas con el fin de que no llegue nunca la paz social”.

Hasta el momento, “al menos 30 operaciones similares están en marcha con el mismo propósito. Ninguna de ellas conducen a soluciones de ningún tipo, y todas contribuyen al desperdicio de los recursos del país y la pérdida de más vidas”.

Y continúa: “El país no tiene suficientes hijos para sacrificar al actual poder gobernante.

La solución a la cuestión kurda no es la guerra ni las operaciones militares, sino el desarrollo de un clima favorable para la reconciliación social, el diálogo y la negociación democrática. Atacar la esperanza de paz albergada por la sociedad con operaciones militares es el peor de los daños para el futuro de este país”.

El HDP finalmente llama al gobierno a “frenar este error y acabar con estas operaciones. Nadie tiene el derecho de utilizar la guerra como aparato propagandístico ante las próximas elecciones de Estambul, y menos a utilizar los ataúdes de los soldados. La paz y la voluntad del pueblo prevalecerán”.