En declaraciones a ANF en Adiyaman, una de las áreas más afectadas por el terremoto en Turquía, el diputado del HDP (Partido Democrático de los Pueblos) Kemal Bülbül indicó: "En Adiyaman hay miles de escombros y ruinas. Debajo de estos, hay innumerables vidas humanas. Desafortunadamente estas personas no fueron alcanzadas a tiempo y, por lo tanto, ocurrió una gran tragedia. Incluso ahora, hay informes de que se pueden escuchar sonidos debajo de los escombros, lo cual es muy difícil en este momento. Intentamos dirigir diferentes equipos allí. Desde el principio, no ha habido ayuda del gobernador, la agencia de manejo de desastres AFAD, el municipio o cualquier otra agencia gubernamental en cuanto a apoyo material y moral o retiro de escombros, además no solo no ha habido ayuda, sino también los medios de comunicación informan, casi ridículamente, dando la impresión de que todo va sobre ruedas, y que el gobierno tiene éxito en este sentido".

"Las personas se sienten inseguras y abandonadas"

Bülbül señaló que aún no se han retirado los escombros y que la mayoría de las personas han perdido la vida debido al retraso en las labores de recuperación: "Todavía hay cadáveres bajo los escombros.  El segundo problema es el hambre, el tercero la sed, el cuarto la comunicación y el quinto la falta de un método para que la gente sienta que no se la deja sola. Por lo tanto, la sociedad se siente extremadamente insegura y abandonada. ¿Qué debe hacer la gente que ha perdido a sus familiares, hijos y padres? ¿Deben rendirse al dolor o deben protestar? Poco a poco, la situación llega a un punto de grave colapso mental. Durante nuestra visita de hoy al hospital de Adiyaman, los médicos nos explicaron que la mayoría de las víctimas del terremoto habían perdido órganos y extremidades. A algunos tuvieron que amputarles los brazos. La razón principal, según ellos, fue el retraso en la búsqueda y rescate. Los distritos más afectados son Gölbaşı, Besni y Çelikhan. Estos son los lugares que se encuentran en la línea de falla. Todavía no se ha llegado a los pueblos, ni siquiera a las ciudades del distrito. Allí no ha llegado ninguna ayuda. Como HDP, nos reunimos con las organizaciones democráticas de masas de aquí en cuanto llegamos y formamos un equipo de coordinación y crisis".

"No quedan edificios estables"

Bülbül explicó que estaba en Mardin en el momento del terremoto y que la gente de Maraş y Adıyaman se lo contaron con gran pánico: "Inmediatamente partimos de Mardin a Adiyaman y nos detuvimos en Kahta en el camino. Se habían derrumbado seis edificios en Kahta. Visitamos el hospital alrededor de las ocho de la mañana. En la sala de emergencias, nos dijeron que había 17 cadáveres. Luego llegamos a Adiyaman y el escenario era uno de tragedia. No quedan edificios estables. Los restantes están gravemente dañados e inutilizables".

Una traghedia aún mayor

Hablando del equipo de crisis que se creó inmediatamente, Bülbül declaró: "El equipo de crisis está formado por el HDP y organizaciones democráticas de masas. Estas estaban muy bien organizadas. Establecimos dos puntos de recogida, uno en el Cemevi (lugar de culto aleví) de Yenimahalle y otro en el salón de bodas Hisar, en el barrio de Kayalik. Aquí es donde enviamos los camiones que llegaban con los artículos de socorro. Desde estos puntos se distribuyeron la merdadería. Desde ayer, el Ayuntamiento de Çınar está allí y ha instalado una cocina en el patio del Cemevi y hemos podido comer algo caliente por primera vez. Desde los camiones se distribuyeron alimentos, ropa, mantas y cosas similares. Las necesidades más urgentes en este momento son generadores, tiendas de campaña, maquinaria de construcción y grúas para poder levantar los escombros. Como pueblo kurdo, hemos vivido grandes tragedias y masacres, pero esta es una tragedia aún mayor".