El vicepresidente del grupo parlamentario del HDP, Saruhan Oluç, ofreció una rueda de prensa en el Parlamento. Comenzó su intervención diciendo que "esta rueda de prensa tendrá un único punto en el orden del día. Se trata de la evolución de la reforma constitucional. Como saben, hay una propuesta de enmienda constitucional presentada por la Alianza Popular al Parlamento. Hemos explicado nuestra posición sobre la cuestión de la no discriminación, los derechos y las libertades en su conjunto en nuestra declaración anterior. Hemos hecho hincapié en nuestra actitudde que debe abordarse como una cuestión de principios y valores. Hemos dicho que en un proceso en el que hay tantas violaciones de derechos, discriminaciones, desigualdades e ilegalidades, y las libertades y la democracia están siendo duramente atacadas, la propuesta de cambiar sólo la cuestión del velo sería insuficiente para encontrar una solución al problema de las libertades en Turquía."

'Jugada electoral'

"No hemos tenido ningún problema con el velo en el pasado, y no lo tenemos hoy. Tenemos diputadas que llevan el velo en nuestro Grupo Parlamentario desde 2015. Pero decimos que en un entorno en el que todos los ciudadanos, especialmente los kurdos, los alevíes y las diferentes creencias e identidades, no tienen los mismos derechos de ciudadanía, se deben tomar medidas integrales para satisfacer estas demandas sociales. Dijimos que el hecho de que sólo se introduzcan cambios en la cuestión del velo y la institución familiar nos recuerda más a una maniobra electoral del bloque gobernante antes de las próximas elecciones que a otra cosa", sostuvo el portavoz parlamentario.

"No aceptamos la petición de reunión del AKP"

Sobre la posibilidad de acudir a la reunión solicitada por el AKP, Oluç fue claro:

"El AKP nos pidió una cita para el miércoles para debatir la propuesta de enmienda constitucional. Discutimos esta petición tanto en nuestro grupo como en la dirección del partido. Evaluamos esta petición con nuestra dirección y nuestros co-presidentes. Nuestra postura es la siguiente: los intentos de ilegalización son un caso de venganza contra el HDP. Hemos decidido no hablar con el AKP sobre la propuesta de enmienda constitucional. Por supuesto, no consideramos negativos los esfuerzos de diálogo del ejecutivo del Grupo del AKP. Sin embargo, pensamos que ese terreno de encuentro ha desaparecido debido a la política del Gobierno hacia nosotros."