En mayo, los abogados Dr. Lukas Theune y Dr. Peer Stolle presentaron una solicitud al Ministerio Federal del Interior para que se levante la prohibición de las actividades del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), vigente desde 1993. El profesor Roland Hefendehl, del Instituto de Criminología y Derecho Penal Económico de la Universidad de Friburgo, ha elaborado un dictamen jurídico sobre las actividades del PKK en Alemania que son relevantes para el derecho penal. El dictamen aún no se ha publicado, pero Roland Hefendehl habló con Radio Dreyeckland sobre la cuestión de si la prohibición puede justificarse legalmente en términos de delitos penales.
Cuando se le preguntó de dónde procedía su interés por el PKK, Hefendehl respondió que, como abogado penalista interesado en la sociopolítica, no se podía ignorar al PKK. Según Hefendehl, el PKK desempeña un papel importante, especialmente en la actual disputa sobre el bloqueo de la adhesión de Suecia y Finlandia a la OTAN por parte del presidente turco Erdogan. También se interesó por el complejo de los llamados delitos de asociación según el artículo 129 del Código Penal y la cuestión de cómo se hace política a través del derecho penal. En su opinión, el requisito para la prohibición del PKK en forma de una "acción militante-agresiva contra los principios elementales de la constitución" no se daba definitivamente. El PKK, dijo, no estaba "dirigido contra la existencia del Estado alemán ni contra los derechos humanos o los principios de la soberanía del pueblo y la separación de poderes".
Hefendehl examinó principalmente los presuntos delitos relacionados con el PKK en Alemania entre 2010 y 2020. La Oficina Federal de Policía Criminal registró unos 11.000 casos de presuntos delitos relacionados con el PKK. Casi el cincuenta por ciento de los casos son violaciones de la ley de asociaciones, que sólo se derivan del hecho de la prohibición de actividades. El 16% son daños a la propiedad, el 10% son lesiones corporales, el 9% son delitos contra la ley de reuniones, y en otros casos hay ruptura de la paz y resistencia. Señaló que esto no es comparable a los delitos que fueron la base de la prohibición de 1993. En este sentido, el levantamiento de la prohibición, dijo, conllevaría una reducción de los supuestos delitos. Además, afirma que "el PKK y sus suborganizaciones han cambiado con el tiempo". Sostiene que el levantamiento de la prohibición tendría un efecto positivo.
La solicitud de levantamiento de la prohibición al Ministerio Federal del Interior sigue pendiente. En caso de que se rechace, se emprenderán acciones legales ante el Tribunal Administrativo Federal.