Hoy comenzó en Turquía una huelga de dos días de profesionales médicos y trabajadores de la salud. El trabajo se suspendió en numerosas ciudades en protesta contra la política de pandemia mortal del gobierno, los bajos salarios y por mejores condiciones laborales. Emergencias y cuidados intensivos quedaron exentos de la huelga.

La Asociación Médica Turca (TTB) convocó la huelga nacional en el "Día de la Medicina", que se celebra en Turquía desde hace más de un siglo, el 14 de marzo. Durante meses, las cámaras y los sindicatos de la asociación han estado tomando las calles y organizando huelgas para resaltar los males del sistema de salud. El gobierno sigue con su política de contagios asesinos y no toma ninguna medida sanitaria contra la pandemia descontrolada. Oficialmente, la pandemia se ha cobrado casi 100.000 vidas en Turquía hasta la fecha, incluidos cientos de trabajadores de la salud. Se estima que el número real de muertos es más del doble. Casi 15 millones de personas han contraído el virus.

El Dr. Halis Yerlikaya del Consejo Central de TTB participó en la huelga en Mardin. El médico señaló que el sistema de salud del país se ha convertido en un riesgo para la salud pública. Los bajos salarios, la sobrecarga de personal y la crisis económica estaban teniendo un impacto tan masivo que los servidores llegaron a un punto en el que ya no podían brindar servicios de salud, indicó. "El trato a los profesionales de la salud nunca ha sido tan indigno como hoy", denunció Yerlikaya.

Binbaş: "La política de muerte cuesta más vidas cada día"

El director de la asociación médica local, Dr. Mustafa Volkan Binbaş, acusó al gobierno de hacer esfuerzos para "manejar la percepción pública" en lugar del proceso epidémico desde el comienzo de la pandemia. "Con medidas inexistentes, querían escribir una historia de éxito para el gobierno, mientras que el único objetivo era generar ganancias para la élite económica y financiera", criticó Binbaş. En ningún momento se manejó la pandemia de manera transparente o de acuerdo con los estándares internacionales, aseguró. Desde el primer día, relató, Ankara implementó una política de salud nebulosa para lidiar con el coronavirus. Los hechos y las cifras se han oscurecido y distorsionado, y las acciones de los gobernantes han sido fortuitas, problemáticas, inconsistentes y contradictorias, indicó Binbaş y agregó: "Estas políticas de muerte están costando más vidas cada día".

Lema de la huelga: "Conocemos a los responsables de las graves consecuencias de la pandemia"

Otras demandas de la TTB incluyen turnos más cortos y mejores salarios. Actualmente, los sueldos de los médicos y del personal de enfermería están apenas por encima del mínimo legal. En un contexto de fuertes aumentos de precios, las y los empleados de una amplia gama de sectores protestan por mejores salarios en Turquía casi a diario. También exigen medidas para protegerlos del abuso verbal y físico por parte de los pacientes o sus familiares. 

La violencia contra las y los trabajadores ha aumentado considerablemente a raíz de la pandemia. Según un informe del sindicato Sağlık-Sen, 316 trabajadores de la salud fueron agredidos el año pasado. Cada vez más profesionales médicos también se van al extranjero. Solo en enero, según los informes, había 197 médicos, y el año pasado hubo 1400 en total, en comparación con solo 59 en 2012, durante todo el año.