El líder religioso iraní Ali Khamenei rompió su silencio sobre las protestas que comenzaron tras el asesinato de la kurda Mahsa (Jina) Amini, cuando las masas salieron a las calles bajo el liderazgo de las mujeres para expresar su demanda de democracia y libertad.
Khamenei afirmó que las y los manifestantes son "un diseño de los Estados Unidos y el falso régimen sionista de ocupación [Israel] y algunos traidores iraníes en el extranjero". "En el accidente que ocurrió, una mujer joven falleció, lo que también nos dolió, pero las reacciones a su muerte antes de que se lleven a cabo las investigaciones… cuando algunos vienen a hacer las calles inseguras, queman coranes, quitan los hijabs de las mujeres cubiertas y queman las mezquitas y los autos de la gente, no son una reacción normal y natural", declaró durante una ceremonia de graduación en una universidad policial en Teherán.
"La policía tiene el deber de enfrentar a los delincuentes y garantizar la seguridad del país. Por lo tanto, quien ataca a la policía deja indefensos a los ciudadanos frente a delincuentes, bandidos y ladrones", agregó.
Ha habido protestas en decenas de ciudades iraníes desde que la policía moral asesinó a Amini, de 22 años, en Teherán.
Según la Organización de Derechos Humanos iraní con sede en Oslo, al menos 133 personas han muerto en las protestas que continúan desde el 16 de septiembre. Se informa que más de 40 personas fueron asesinadas en la ciudad de Zahidan solo el viernes.
Según el grupo de oposición iraní, People's Mujahideen, las protestas se extendieron a 170 ciudades en 31 provincias, donde murieron 400 personas y alrededor de 20.000 fueron detenidas.