La Guardia Revolucionaria de Irán ha reivindicado la autoría del ataque con una docena de misiles balísticos en la capital de la Región Federal del Kurdistán en el norte de Irak, Hewler (Erbil), en la madrugada del domingo, según han informado los medios de comunicación estatales iraníes. Estos medios han añadido que el ataque ha sido dirigido contra “centros estratégicos” israelíes en Erbil.

Los misiles, que tenían como objetivo el nuevo edificio del consulado de los Estados Unidos, sólo causaron daños materiales y un civil resultó herido, según el Ministerio del Interior kurdo. Un funcionario de seguridad iraquí ha comunicado a Reuters que los misiles fueron fabricados en Irán.

“Cualquier repetición de los ataques por parte de Israel será recibida con una respuesta dura, decisiva y destructiva”, ha dicho la Guardia Revolucionaria en una declaración recogida por los medios de comunicación estatales.

Un funcionario estadounidense ya culpó a Irán del ataque a primera hora del domingo, pero no dio más detalles. Las autoridades iraníes aún no han hecho comentarios al respecto.

Por otra parte, el portavoz del Departamento de Estado de los Estados Unidos ha calificado el ataque de “atroz”, pero ha aclarado que ningún estadounidense resultó herido y que no hubo daños en las instalaciones del gobierno de los Estados Unidos en Erbil.

Las fuerzas estadounidenses estacionadas en el complejo del aeropuerto internacional de Erbil han sido objeto en el pasado de ataques con cohetes y drones que Washington atribuye a grupos de milicianos alineados con Irán, pero no se han producido ataques de este tipo desde hace varios meses.

“Es prematuro señalar con el dedo acusador a una parte específica, pero los informes iniciales muestran sin lugar a dudas que fue un ataque transfronterizo con misiles de corto alcance”, ha dicho un funcionario de seguridad iraquí, que ha hablado bajo condición de anonimato. “Se han recuperado partes de los misiles disparados y fueron fabricados por Irán”.

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