El enviado especial de la Secretaría General de la ONU para Libia, Ghassan Salame, ha advertido al Consejo de Seguridad de que la situación en el país está empeorando a medida que aumenta la amenaza de un conflicto a gran escala.

Hablando en una sesión del Consejo por videoconferencia, el alto representante de la ONU ha alertado de que hay actores sin escrúpulos dentro y fuera de Libia haciendo esfuerzos para frustrar los intentos de paz.

Según el responsable de la misión de la ONU en Libia, la situación se está volviendo insostenible: la población libia se está empobreciendo, hay un gran vacío de seguridad y un conflicto acabaría afectando al suministro de energía en todo el mundo a largo plazo.

El alto el fuego acordado a principios de este mes se mantiene sólo en el nombre: tan sólo en los dos últimos días, 4 niños de menos de 12 años de edad han muerto a consecuencia del bombardeo en Trípoli, ha lamentado Salame.

Además, ha añadido que se han denunciado intensos enfrentamientos fuera de la capital. Salame ha expresado su preocupación en torno a los refuerzos militares de ambas partes del conflicto, lo que podría dar lugar a una fuerte inestabilidad en la región.