El juicio por el primer ataque no fatal contra la familia Dedeoğulları ha comenzado en la ciudad anatolia de Konya. Nueve sospechosos están acusados ​​de intento de asesinato, asalto y allanamiento de morada en relación con el ataque del 12 de mayo de 2021.

Seis miembros de la familia kurda fueron atacados en su casa en ese momento y golpeados casi hasta la muerte por una turba de linchadores armados con palancas, piedras y cuchillos, por motivos racistas. Mientras las autoridades judiciales y de seguridad permanecían inactivas, el 30 de julio se produjo un segundo ataque mortal en el que siete miembros de la familia Dedeoğulları fueron asesinados a sangre fría.

Los ataques están siendo investigados independientemente uno del otro. El juicio por los asesinatos se lleva a cabo desde diciembre pasado. Hasta el día de hoy, están siendo juzgados nueve sospechosos que presuntamente estuvieron involucrados en el ataque de linchamiento.

Además de Çetin Dedeoğulları, el único sobreviviente de la familia nuclear Dedeoğulları, numerosos familiares, así como el portavoz de derechos humanos del HDP, Ümit Dede, las y los diputados del HDP, Murat Çepni, Hüda Kaya, Zeynel Özen y otros representantes del HDP, participaron en la apertura de el juicio ante la 8ª Gran Sala Penal de Konya. La acusación estuvo representada por dos fiscales y el juicio estuvo acompañado de una nutrida presencia policial.

De los nueve acusados, que también presuntamente planearon la masacre posterior de la familia Dedeoğulları en un grupo de WhatsApp, solo dos, Ali Keleş y Lütfi Keleş, están bajo custodia. En el transcurso del juicio, ambos se contradijeron repetidamente y revisaron sus declaraciones. En la sala del tribunal, hubo fuertes protestas de las filas de espectadores.

Una y otra vez, los familiares de las víctimas gritaban "No mientas" en la sala del tribunal. La policía entonces actuó contra los familiares de las víctimas. Cuando Çetin Dedeoğulları criticó en voz alta las acciones de la policía, estalló un motín. Varios policías tiraron al suelo a los familiares y los golpearon. El tribunal se retiró y la policía hizo despejar la sala del tribunal. El juicio continuará el 11 de febrero.

Mientras tanto, tres miembros de la familia Dedeoğulları fueron detenidos después de una protesta en el Palacio de Justicia de Konya y llevados para ser interrogados por la policía. No está claro de qué se les acusa.