Los casos con Covid-19 aumentan en Bakur tras la inoperancia del gobierno

"La situación no es nada halagüeña. El número de pacientes en Diyarbakır es muy elevado, no hay espacio en las unidades de cuidados intensivos", declara el doctor Halis Yerlikaya.

Mientras que el número de casos con Covid-19 aumentó en Bakur (Kurdistán del Norte), 346 trabajadores de la salud dieron positivo en Amed (Diyarbakır). El gobierno del AKP-MHP evita deliberadamente tomar medidas contra la epidemia.

La rápida normalización experimentada tras el cierre para combatir el brote de Covid-19 dio lugar a advertencias sobre una segunda oleada que podría llegar antes de lo previsto.

Sin embargo, el gobierno no tomó medidas y los datos no se dieron adecuadamente, lo que llevó a la Asociación Médica de Turquía a decir en más de una ocasión que la relajación era peligrosa.

Los medios de comunicación informaron que el número de casos aumentó de Amed a Cizre y finalmente la Plataforma de Salud Diyarbakır anunció que 346 trabajadores de la salud de la ciudad fueron diagnosticados con Covid-19 a partir del 6 de agosto.

Según el comunicado, la enfermedad, que fue diagnosticada principalmente en enfermeras y comadronas, infectó a  95 durante los 2 meses después del primer caso, y aumentó a 251 después del retorno progresivo a la normalización tras el 1 de junio.

Hablando con ANF, el oncólogo Dr. Halis Yerlikaya destacó que hay unos 600 pacientes en los hospitales de Amed y muchos en cuarentena en sus casas. "La situación no es nada halagüeña. El número de pacientes en Diyarbakır es muy alto, no hay lugar en las unidades de cuidados intensivos. Tenemos alrededor de 300 pacientes al día en Diyarbakır. Algunos de estos pacientes vienen a las emergencias y se les da medicación y se les envía a casa, y luego, cuando su condición empeora, son llevados de vuelta al hospital. Hay muchos pacientes que se mantienen en cuarentena en casa, mientras que alrededor de 600 personas están en los hospitales de Diyarbakır".

Al declarar que el gobierno ha seguido el modelo de inmunidad de la manada, Yerlikaya subrayó que esta política se ha aplicado aún más en la región [kurda]: "En realidad, la gente aquí está casi abandonada a su suerte. El gobierno está actuando de acuerdo a las preocupaciones económicas, no a los datos epidemiológicos y científicos. El número de casos ha aumentado aún más con las rápidas medidas de normalización adoptadas después del 1 de junio, ya que las preocupaciones económicas están en primer plano y no la salud pública".

Yerlikaya dijo que las medidas adoptadas son insuficientes: "No se puede resolver este problema simplemente aumentando el número de camas de cuidados intensivos en los hospitales. Este problema debe ser manejado sobre una base científica. La manera de hacerlo es probando a todos. Actualmente, si uno de los miembros de la familia da positivo, los demás no se someten a las pruebas, lo que por supuesto es un problema. La gente no toma muchas precauciones. Siempre advertimos que se debe usar la mascarilla para cubrir la boca y la nariz, se debe mantener el distanciamiento social, se debe prestar atención a la higiene, especialmente en ambientes cerrados. Una de las razones más importantes del aumento de casos en la región es que la gente se reúne en ambientes cerrados, por ejemplo en bodas y funerales. Pero, en última instancia, esto no puede manejarse con medidas individuales. Lo que el gobierno está haciendo en este momento se limita a hacer llamadas sobre este tema. Pero esto no es suficiente, la gente también debe desempeñar su papel y el gobierno debe cumplir sus responsabilidades con el respaldo de los datos científicos".