Los jóvenes llevan 9 días resistiendo al golpe de Estado en el municipio de Akdeniz, en Mersin. El viernes por la noche, los jóvenes salieron a las calles de los barrios de Yenipazar y Demirtaş y encendieron hogueras.

Los jóvenes respondieron al ataque policial con fuegos artificiales, cócteles molotov y bombas de sonido. La protesta se prolongó hasta altas horas de la noche.

Antecedentes

El 10 de enero, en Mersin, fueron detenidos los co-alcaldes del municipio de Akdeniz, Hoşyar Sarıyıldız y Nuriye Aslan, y los concejales Özgür Çağlar, Neslihan Oruç, Yakup Danış y Hikmet Bakırhan.

El 13 de enero, la fiscalía remitió a la justicia a los co-alcaldes Hoşyar Sarıyıldız y Nuriye Arslan, y al concejal Özgür Çağlar, acusados de "pertenencia a una organización ilegal", "financiación de una organización ilegal", "propaganda de una organización ilegal" y "oposición al artículo 2911", citando testimonios secretos de testigos. El fiscal pidió que fueran enviados a prisión. Para los demás concejales, el fiscal pidió su arresto por "pertenencia a una organización ilegal".

El Tribunal Penal de Paz de Guardia emitió órdenes de prisión contra Sarıyıldız y Arslan, así como contra Çağlar, Bakırhan y Oruç. Danış fue puesto en libertad condicional.

Las detenciones contra la oposición política, activistas, la prensa libre, los abogados e incluso, los kurdos y las kurdas por el hecho de serlo, son comunes en la República turca. Generalmente, a estas personas se les imponen cargos de terrorismo por los que son suspendidos prácticamente todos sus derechos y enviados a prisión, impidiendo de este modo que ejerzan su trabajo y alcen la voz contra las continuas violaciones del Estado. En el caso de la detención de personas sólo por su etnia o acciones puntuales, el cargo suele rebajarse a “propaganda de una organización ilegal”, lo que sirve para ahuyentarlas de los movimientos sociales y organizados de la oposición.

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