La campaña fue lanzada en Sudáfrica por el Grupo de Acción por los Derechos Humanos Kurdos (KHRAG) junto con el Congreso de Sindicatos Sudafricanos (COSATU). La carta recuerda el complot internacional con el que el representante kurdo Abdullah Öcalan fue entregado al Estado turco el 15 de febrero de 1999. En la carta abierta los sindicatos dicen: "Hace 22 años que Abdullah Öcalan está encarcelado en condiciones similares a las impuestas a Nelson Mandela. Öcalan nunca ha dejado de guiar a su pueblo hacia la paz y la democracia en Turquía, Siria y todo Oriente Medio. La sabiduría y la visión de futuro del "Confederalismo Democrático" lo atestiguan, pero lamentablemente el régimen turco y el dictador Erdoğan han convertido a Turquía en una prisión y un cuartel. Los derechos políticos y humanos más básicos son negados, la crisis social y económica en curso y la creciente pobreza son ocultadas por el sangriento régimen turco."

"Naciones Unidas debe mediar en un proceso de paz"

Los sindicatos piden a la ONU que actúe como mediadora para la paz y la justicia en Turquía y el Kurdistán y añaden que "el gobierno italiano está más interesado en los negocios sucios (incluida la venta de armas) que en la defensa de los derechos humanos y la lucha contra las guerras". Decenas de miles de personas de todo el mundo participan en la campaña por la liberación de Abdullah Öcalan en un momento en el que la pandemia está destruyendo la vida de millones de personas, matando de hambre a la gente y amenazando especialmente a los encarcelados.

Como sindicatos hemos estado activos por la paz y la democracia en Turquía, Siria, Oriente Medio y Rojava durante años y declaramos una vez más que estamos comprometidos con el trabajo y los llamamientos de la Campaña Internacional "Ha llegado la hora: Libertad para Abdullah Öcalan - Para apoyar una paz justa en Turquía'".