Manifestación en Basilea contra las masacres y ataques turcos

En Suiza se realizó una manifestación contra las políticas genocidas del Estado turco.

Las víctimas de las masacres de Maras, Roboski y de la prisión del 19 de diciembre fueron conmemoradas en la ciudad de Basilea, Suiza.

Los activistas también protestaron contra el aislamiento impuesto al líder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan y saludaron la resistencia llevada a cabo por la copresidenta del DTK y diputada del HDP Hakkari Leyla Güven.

El grupo se reunió en el parque Dreinrose y marchó a Theodorskirch platz. La marcha contó con el apoyo de la izquierda suiza.

Los activistas portaban banderas del PKK y fotos de Öcalan y coreaban consignas condenando las masacres del pasado del Estado turco, así como las nuevas amenazas contra Rojava.

Al final de la marcha se pronunciaron discursos.

Hablando en nombre del comité organizador, Hüseyin Mamaklı dijo que la prisión del 19 de diciembre y las masacres de Roboski formaban parte de la tradición del Estado. "Los que no desenmascararon a los autores de Maraş y Roboski, buscan hoy nuevas masacres del pueblo kurdo. Pero hoy se enfrentan a un pueblo kurdo que resiste y guía el Medio Oriente".

Mamaklı señaló que el pueblo kurdo seguirá defendiendo la necesidad de liberar a Öcalan en cualquier circunstancia.

Zürcher: El mundo debe defender la Revolución Rojava

La copresidenta del partido suizo BasTa, Tonja Zürcher, dijo que los kurdos no deben quedarse solos en su protesta contra la decisión de Estados Unidos de retirarse de Siria.

Enfatizando la importancia de la lucha de los kurdos contra DAESH (ISIS), Zürcher señaló que toda la humanidad debe proteger la Revolución de Rojava y mantenerla. "Rojava nunca está sola", añadió Zürcher, instando a Europa a actuar para poner fin a las amenazas contra la Rojava.

Glattli: La importancia de la revolución de Rojava

Después de Zürcher, el diputado del Parlamento Nacional de los Verdes, Balthasar Glattli, señaló la importancia de la Revolución de Rojava e hizo hincapié en que los kurdos no deben ser abandonados. "La Revolución de Rojava -dijo Glattli- no es sólo para Oriente Medio. Es un modelo que servirá de ejemplo también para Europa".