Movimiento Ecológico Mesopotámico promete luchar contra el saqueo y la explotación de la naturaleza

"Los espacios de vida del pueblo kurdo están en peligro", denunció el Movimiento Ecológico Mesopotámico, insistiendo en que “nuestra lucha continuará hasta que termine el saqueo y la explotación”.

El Movimiento Ecológico Mesopotámico publicó una declaración escrita sobre la marcha al Monte Cudi en Şırnak organizada el 17 de septiembre bajo el lema "Marchamos contra la destrucción causada por la guerra y el saqueo de la naturaleza".

“Nuestra lucha continuará hasta que termine el saqueo y la explotación en Turquía y Kurdistán. El sistema fascista que explota, despobla y destruye Kurdistán y su naturaleza en todos los sentidos está destruyendo el ecosistema de forma irreversible al talar árboles en la provincia de Şırnak y en diferentes partes kurdas con el pretexto de la seguridad durante los últimos dos años”, indica el comunicado de el Movimiento Ecológico Mesopotámico, que además incluía lo siguiente:

“Se han introducido reacciones sociales y una lucha legal contra la tala sistemática de árboles en curso en Şırnak, en curso durante los últimos dos años. Los árboles talados son transportados a través de nuestras ciudades a otras provincias cada día. La tala masiva de árboles por parte de los guardias estatales y locales no solo debe verse como una destrucción ambiental. Esta es más bien un ecocidio que busca el desplazamiento del pueblo kurdo y la destrucción de sus viviendas y la naturaleza.

Atenazado por el miedo tras la convocatoria de una marcha y una conferencia de prensa programada para el 17 de septiembre, el sistema introdujo prohibiciones y restricciones en respuesta a la creciente reacción pública. Sin embargo, a pesar de todas ellas, nos reunimos en Cizre el 17 de septiembre.

Desafiando todas las prohibiciones y restricciones, nos reunimos con todos los segmentos sociales de Turquía y Kurdistán. Nos solidarizamos con nuestra sonrisa, fe y fuerza. Mientras el sol brillaba en el cielo, expresamos nuestra demanda de paz contra la guerra, dejando claro que defenderíamos cada árbol. Mientras las madres que no hablan turco coreaban consignas en turco, nuestras compañeras de Turquía acompañaban el lamento de las madres. En ese día, éramos uno y unidos. Solo lo lograremos si nos unimos.

Nos gustaría agradecer a todas las instituciones y asociaciones que respondieron a nuestro llamado y estuvieron allí con nosotros ese día, así como a aquellos que no pudieron venir pero lanzaron declaraciones de apoyo”.