Miembros del PKK (Partido de los Trabajadores del Kurdistán) y del PAJK (Partido de las Mujeres Libres del Kurdistán) encarcelados y encarceladas en Turquía, iniciaron una huelga de hambre el 27 de noviembre en apoyo de la campaña internacional "Libertad para Öcalan, una solución política a la cuestión kurda". La huelga de hambre llevada a cabo en grupos alternos comenzó el 27 de noviembre, día de la fundación del PKK, y debía continuar hasta el 15 de febrero, aniversario de la conspiración internacional contra el líder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan.
En una declaración del 12 de febrero, Kaya anunció: “Hemos ampliado nuestra huelga de hambre alterna para poner fin al aislamiento impuesto a nuestro líder. Queremos que todos sepan que entraremos en una nueva fase el 15 de febrero y hasta después de las elecciones que se celebrarán el 31 de marzo. Declaramos al público que si el aislamiento de nuestro líder continúa después de las elecciones, llevaremos nuestras acciones al siguiente nivel y continuaremos hasta que obtengamos resultados".
Según el representante de los prisioneros, Deniz Kaya, la huelga de hambre continúa “con gran determinación, con la moral y la fuerza que recibimos de la Resistencia Imrali de nuestro Líder, las exitosas operaciones revolucionarias llevadas a cabo por nuestra heroica guerrilla, las acciones de 'Vigilia de la Justicia' iniciadas por nuestras familias y la resistencia desarrollada por nuestro pueblo en todas partes".
Kaya declaró: “Hacemos un llamado a todo nuestro pueblo, instituciones democráticas y amigos para aumentar la resistencia dentro del alcance de la iniciativa internacional. Hacemos un llamado a todo nuestro pueblo y amigos a participar en las actividades electorales para evitar la institucionalización del fascismo. Hoy es el día para romper el aislamiento en Imrali, desmantelar la política de genocidio kurdo y saludar la Primavera de la Libertad del Pueblo".