Los ataques y bombardeos del Estado turco contra las regiones del noreste de Siria han aumentado recientemente. El Estado turco concedió el control de Afrin al grupo Hayat Tahrir Al-Sham y continúa sus amenazas de invasión contra otras regiones.

Evîn Swêd, representante de la Administración Autónoma del Norte y Este de Siria en Sulaymaniyah, hizo evaluaciones sobre los ataques de invasión turca y sus resultados. Swêd recordó que se formó un sistema democrático bajo el liderazgo de las mujeres en el cantón de Afrin y cientos de miles de personas que huyeron de las zonas de guerra emigraron a Afrin y llevaron una vida pacífica.

Swêd dijo: "Sin embargo, en 2018, el Estado turco lanzó un ataque de invasión contra Afrin con el apoyo de las fuerzas internacionales. Miles de personas que se establecieron allí apoyaron a la Administración Autónoma, sus tierras y sus casas. Se desplegó una resistencia de 58 días que sorprendería al mundo entero. Después de la invasión del Estado turco, los grupos mercenarios respaldados por Turquía y sus familias se asentaron en Afrin."

Swêd añadió: "Saquearon todo, desde los olivos hasta los lugares sagrados de los yazidíes, los cristianos y la gente de la región. Los habitantes de Afrin son objeto de todo tipo de torturas y violencia, incluidos los abusos a mujeres y niños, los robos y la corrupción. Aunque se denunciaron todos estos hechos, nadie rindió cuentas. Los informes confirmaron que los bienes/productos de la población de Afrin se vendieron a diferentes empresas de Kuwait y otros países árabes. Además, se están construyendo urbanizaciones para los mercenarios y sus familias en Afrin. Las mujeres y los niños son los que más sufren torturas y ataques. Cientos de mujeres fueron torturadas en las cárceles y el destino de muchas otras mujeres sigue siendo desconocido. Cientos de miles de mercenarios se han instalado en Afrin, y sus asesinatos, amenazas, saqueos y corrupción han sido continuos."

Volver a casa

Swêd sostuvo que la gente de Afrin nunca perdió la esperanza de regresar a sus tierras a pesar de todo. También habló de la ocupación de Hayat Tahrir al-Sham (HTS): "Decenas de grupos mercenarios diferentes se han desplegado en Afrin. Desde que Afrin fue ocupada, estos grupos mercenarios han estado luchando entre sí. Las guerras se libran sólo por el botín, el saqueo y el robo. El HTS también es considerado como una fuerza invasora por la gente de la región. Las prácticas bárbaras en Afrin se han documentado desde el principio".

Swêd añadió: "El HTS ha sido reforzado como parte del plan del Estado turco. Algunos otros grupos protestaron contra el Estado turco por el respaldo al HTS. Turquía pretendía controlar a todos los grupos mercenarios con la ayuda del HTS. Es posible que se reagrupen, fortalezcan y organicen sus tropas para un posible ataque al noreste de Siria. Esto supondrá un grave peligro para el noreste de Siria.

Ya ha habido conversaciones de reconciliación entre Turquía y Siria. Los servicios de inteligencia de ambos países han mantenido reuniones. El Estado turco ha hecho todo lo posible para erradicar la revolución de Rojava. El reciente acercamiento con Turquía no servirá al pueblo sirio ni a sus intereses. El objetivo de Turquía es destruir los logros de los pueblos y llevar a cabo más masacres."

Todos los ciudadanos exigen una Siria democrática

Swêd también se refirió a las conversaciones entre la Administración Autónoma y Damasco. "La Administración Autónoma puede ser un ejemplo para toda Siria. Se puede establecer una vida común en la que coexistan todos los ciudadanos y grupos religiosos. Es posible que las conversaciones entre la Administración Autónoma y Damasco no hayan dado el resultado deseado hasta ahora. Esto depende de la Administración Autónoma y de algunas partes internacionales que promueven un acercamiento. Las negociaciones pronto darán resultados y surgirá una Siria democrática. Todos los sirios exigen un país donde todos tengan los mismos derechos".

Swêd continuó: "Todo el mundo se está preparando para nuevas guerras. Muchos países pueden verse envueltos en guerras. El pueblo del noreste de Siria se está preparando para una guerra seria. Hay un enemigo que insiste en el exterminio. Esta guerra podría extenderse a toda la región. No seamos víctimas de esta guerra, no muramos en un genocidio como los armenios en 1915. Para no convertirnos en víctimas del siglo XXI, debemos preservar y perpetuar nuestros logros. Sólo podemos ganar mediante la unidad y la solidaridad".