En un programa de televisión emitido por CNN-Türk el 16 de febrero, el antiguo jefe del Departamento de Inteligencia del Estado Mayor Ismail Hakkı Pekin admitió que los asesinatos del 9 de enero de 2013 en París formaron parte de una operación del Estado turco. El 9 de enero de 2013, un sicario asesinó en París a las tres revolucionarias kurdas Sakine Cansız, Leyla Şaylemez y Fidan Doğan. Todos los rastros apuntaron desde el primer momento hacia el MIT, el servicio secreto turco.

Ömer Güney, el asesino detenido, murió en extrañas circunstancias en la cárcel en Francia antes de que se iniciara el juicio. Las autoridades de Francia y Alemania hicieron todo lo posible entonces para que la investigación se detuviera ahí.

Sin embargo, el ex jefe del Departamento de Inteligencia del Estado Mayor Ismail Hakkı Pekin ha vuelto a remover ahora las aguas con un comentario hecho en un programa de televisión turco. En un programa de televisión sobre los ataques en la región de Garê, Ismail Hakkı Pekin dijo que debe haber liquidaciones selectivas de los líderes de la KCK en Irak, Siria y Europa. “También tienen sus elementos en Europa”, dijo, y añadió: “Tenemos que hacer algo en este sentido. Ya se hizo una vez en París…”.

El Congreso de la Sociedad Democrática Kurda en Europa (KCDK-E) y el Movimiento d Mujeres Kurdas en Europa (TJK-E) han emitido un comunicado conjunto instando a los gobiernos europeos, y especialmente a Francia, a actuar.

‘Las declaraciones en los medios estatales equivalen a órdenes de asesinato’

El comunicado del KCDK-E y el TJK-E dice lo siguiente:

“Tras la fuerte derrota en Garê, un representante del Estado turco ha admitido la masacre en París ante las cámaras y difundido nuevas amenazas con sucia propaganda contra los kurdos en Europa. Con estas amenazas, el Estado turco quiere encubrir su derrota y su responsabilidad en la masacre de los soldados y de los agentes turcos del MIT capturados por la guerrilla. Estas declaraciones en los medios de comunicación del Estado fascista equivalen a órdenes de asesinato contra los representantes del movimiento de liberación kurdo”.

Con la confesión del ex jefe de los servicios de inteligencia, las asociaciones kurdas ven confirmadas una vez más sus exigencias de justicia y esclarecimiento. El comunicado continúa: “El ex jefe de los servicios de inteligencia Ismail Hakkı Pekin ha anunciado abiertamente con sus palabras que se pueden cometer, y que se cometerán, nuevas masacres como la de París”.

‘El Estado francés es cómplice’

El comunicado continúa: “El dictador Recep Tayyip Erdoğan fue quien ordenó la masacre de las tres revolucionarias kurdas. Fueron sus asesinos a sueldo quienes llevaron a cabo estos asesinatos. No obstante, el Estado francés impidió que se llevara a cabo una investigación exhaustiva de la masacre, despreciando de forma escandalosa el derecho internacional y convirtiéndose en cómplice de sus autores. El gobierno francés debe considerar esta confesión pública como una prueba concreta y reabrir el caso sobre los asesinatos. Esta confesión debe generar una base legal para llevar a Erdoğan y al resto de los culpables ante un tribunal internacional y condenarlos. Todos los estados europeos deberían tomar medidas en el contexto de esta declaración debido a las amenazas del Estado fascista turco contra personas de Turquía y el Kurdistán que viven en Europa.

Los países europeos y Francia conocen el trabajo de las redes de inteligencia del Estado turco. Las declaraciones del ex jefe de inteligencia Ismail Hakkı Pekin representan una prueba concreta de que el Estado turco está preparando nuevos asesinatos.

Como KCDK-E y TJK-E volvemos a pedirle al gobierno francés que utilice esta oportunidad. Nuestra lucha por la libertad, la igualdad y la democracia contra el fascismo del AKP/MHP continuará con determinación”.