Un civil resultó herido en un ataque de artillería del ejército turco cerca de la pequeña ciudad kurda de Batîfa el viernes por la noche. El hombre, de 54 años, se encontraba en su casa en la localidad de Evleh cuando fue alcanzado en el brazo izquierdo por la metralla de un proyectil. Fue trasladado a un hospital del distrito de Zaxo, al oeste de Batîfa. Su estado es estable y, tras un tratamiento ambulatorio en urgencias, pudo abandonar el hospital.

Batîfa (también Batufa) está situada a unos 20 kilómetros de la frontera turca y pertenece administrativamente a la gobernación de Dihok, en la Región del Kurdistán Iraquí. Allí se producen repetidos ataques del ejército turco, llevados a cabo no sólo por los guardias fronterizos sino también por las tropas de ocupación turcas en la invasión que lleva a cabo desde abril. Ankara legitima estos ataques transfronterizos alegando una “amenaza a la seguridad nacional” por parte del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK). Sin embargo, con el pretexto de “luchar contra el terrorismo” bombardea zonas de asentamientos civiles, a menudo con bombardeos selectivos.

En julio, el ejército turco atacó el centro de veraneo del pueblo de Perex (Parakh), cerca de Zaxo, con cuatro proyectiles de artillería desde una base en el sur del Kurdistán. Nueve personas murieron y más de 20 resultaron heridas. Eran veraneantes árabes del sur de Irak. Entre las víctimas mortales, además, había niños y niñas, el más pequeño de ellos de tan sólo un año de edad. En Batîfa, dos iraquíes perdieron también la vida hace un año a consecuencia de un bombardeo contra su vehículo. A finales de 2021, otra mujer resultó herida en un ataque a su pueblo en Batîfa.