Un novelista alemán insta a Merkel a garantizar la libertad de Abdullah Öcalan

Heinz Jürgen Schneider, uno de los escritores alemanes de novelas policíacas más reconocidos, pide al gobierno federal que actúe en favor de la liberación del líder político kurdo Abdullah Öcalan.

Hemos hablado con el escritor Heinz Jürgen Schneider, abogado de profesión y conocido en Alemania por sus novelas policíacas, sobre el estado de salud del líder político kurdo, que ha causado gran preocupación últimamente.

Afirmando que lleva mucho tiempo siguiendo el aislamiento impuesto a Abdullah Öcalan y las ilegalidades cometidas en Imralı, Schneider ha declarado que el gobierno federal alemán debería actuar en favor de la liberación de Abdullah Öcalan y ha recordado al gobierno de Merkel lo que se hizo por el activista opositor ruso Alexei Nawalny.

Schneider pide al gobierno de Merkel que traiga al líder político kurdo a Berlín, que tiene problemas de salud como Nawalny, y que lo traten allí. Tras ser envenenado por el gobierno de Putin el año pasado, Nawalny fue trasladado a Berlín en un avión privado por iniciativa de Alemania.

Schneider ha pedido a Alemania que ejerza presión política sobre el Estado turco para que libere a Abdullah Öcalan y ha añadido que “si no se hace tal cosa, significa que los diferentes enfoques de Alemania hacia Nawalny y Abdullah Öcalan no son más que hipocresía”.

¿Quién es Heinz Jürgen Schneider?

Heinz Jürgen Schneider vive en Hamburgo (Alemania) y trabajó como abogado durante mucho tiempo. En los últimos años, Schneider empezó a escribir novelas. Es conocido por sus novelas policíacas. Sus libros consisten en la trilogía Muerte en Scheune (Tod in der Scheune), Muerte en Hafenkai (Tod am Hafenkai) y Muerte en Ballnacht (Tod in der Ballnacht), ambientados en la Alemania de 1933. En los últimos años, Schneider también ha publicado En el país de las mentiras (Im Land der Lügen) y 20 millones (Zwanzig Millionen).

Un grupo de abogados alemanes dirigidos por Heinz-Jürgen Schneider y otra abogada de Hamburgo, Britta Eder, presentaron una denuncia penal contra Erdogan y otros funcionarios estatales turcos en 2011. Schneider ha explicado que la denuncia penal que exigía la detención de Erdogan no fue aceptada por la Fiscalía Federal de Karlsruhe.