Se ha informado de que el preso discapacitado Şaban Kaygusuz fue trasladado a la prisión cerrada de tipo T de Kayseri Bünyan nº 1 el 19 de octubre por motivos de "seguridad" y fue sometido a un cacheo al desnudo en la prisión cerrada de tipo D de Diyarbakır. La familia de Kaygusuz explicó el acoso al que fueron sometidos los presos en una rueda de prensa celebrada en Antep con la Asociación de Derechos Humanos (IHD).

La madre de Kaygusuz, Durri Kaygusuz (62 años), destacó que los presos luchan por sobrevivir en condiciones difíciles. Llamando la atención sobre la situación de los presos discapacitados, Kaygusuz declaró: "Como madre, creo que todos los presos enfermos deberían ser liberados. Mi hijo no tiene ni una mano ni una pierna. Ni siquiera puede cambiarse de vestido sin sus amigos. No aceptamos lo que le han hecho".

Dirigiéndose al ministro de Justicia, Abdülhamit Gül, la madre de Kaygusuz señaló: "Debería concederse el arresto domiciliario. Mi hijo no merecía este castigo. Que se haga justicia. Mi hijo está en mal estado. Mi hijo fue sometido a un cacheo al desnudo. Todos los que defienden los derechos humanos deberían ocuparse de los presos enfermos y discapacitados".

El hermano mayor de Kaygusuz, Muhammed Kaygusuz, dijo: "Es inaceptable que cinco personas ataquen a un discapacitado. Esto nos recuerda a los que estaban en la prisión de Diyarbakır el 12 de septiembre [de 1980, durante el golpe militar]. Hacemos un llamamiento a la conciencia de la sociedad: todos deben cumplir con sus responsabilidades. Que el estado sin ley termine cuanto antes. Debe ir una delegación a la cárcel lo antes posible".