Como en muchas otras ciudades, los activistas se reunieron ayer en la capital de Austria, Viena, para protestar contra la invasión turca del sur de Kurdistán y la construcción del muro en el cantón sirio de Afrin, en el norte del país.

Desde el 27 de mayo, el ejército turco ha estado tratando de controlar las regiones kurdas del sur de Bradost y Xakurke con bombardeos y fuerzas terrestres. Los guerrilleros se resisten ferozmente, por lo que los militares se dirigen principalmente a la población.

Miles de personas en varias ciudades europeas acudieron a las calles el sábado para protestar y condenar estos ataques.

Otro tema importante en el mitin en Viena fue la construcción del muro turco alrededor de Afrin, a través del cual Turquía intenta separar y anexar la región del resto de Siria.