Villo Sigurdsson declaró que el PKK será denominado movimiento armado por la libertad, similar al CNA en Sudáfrica y al BOPA en Dinamarca, y que el líder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan debería ser liberado sin condiciones.

El ex alcalde de Copenhague, Villo Sigurdsson, es uno de los primeros firmantes entre los miles de intelectuales, periodistas, escritores y políticos que han firmado una petición para que el PKK sea retirado de la "lista de terroristas". 

Villo Sigurdsson, ciudadano danés nacido en Teherán en 1944, declaró que el PKK es un movimiento por la libertad y afirmó: "El PKK será referido como un movimiento armado por la libertad. Al igual que el CNA en Sudáfrica y el BOPA en Dinamarca durante la Segunda Guerra Mundial".

Sigurdsson continuó diciendo que el enfrentamiento entre el PKK y el ejército turco no tiene nada que ver con el terrorismo: "Según los analistas militares, el conflicto es una guerra regular, y las normas de la guerra internacional deben ser observadas en el conflicto. El PKK está en la lista principalmente porque Turquía es miembro de la OTAN. Sin embargo, el régimen turco obligó a Estados Unidos y a la Unión Europea a clasificar al PKK como organización terrorista. Turquía es miembro de la OTAN. Occidente necesita una alianza con Turquía para contrarrestar a sus adversarios en Rusia y Oriente Medio.

La condición más importante para la paz es la exclusión del PKK de la lista

Villo Sigurdsson, fundador de Solidarisk Alternative y miembro de la junta directiva de Socialdemokratiet y Venstresocialisterne, señaló que el PKK no es considerado "terrorista" en Asia, África, Sudamérica, Australia, Canadá o México, y que Turquía, Estados Unidos y la Unión Europea son los únicos países que consideran al PKK una "organización terrorista".

Tras señalar que la eliminación del PKK de la "lista de terroristas" es uno de los requisitos más importantes para la paz en Medio Oriente, Sigurdsson también se refirió a las prácticas ilegales y arbitrarias a las que se enfrentan los kurdos como resultado de la prohibición del PKK, diciendo: "Mientras Estados Unidos, la Unión Europea y Turquía designen al PKK como terrorista, la lucha kurda por la democracia y los derechos humanos persistirá. Las negociaciones para la paz deben tener lugar, y el PKK, como todos los demás partidos políticos, debe ser acogido como participante en la vida política. En consecuencia, las organizaciones internacionales y los políticos deben trabajar por la causa del PKK".

Sigurdsson llamó la atención sobre el aislamiento impuesto al líder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan, diciendo que debe cesar. Afirmó que las organizaciones internacionales y los gobiernos deben trabajar juntos contra el aislamiento, y que Öcalan debe ser liberado sin condiciones.

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