El Comando General de las Unidades de Protección de la Mujer (YPJ) emitió un comunicado con motivo del nuevo año, expresando su esperanza de que sea un año de paz, libertad y democracia para todos los pueblos de Siria.

La declaración de las YPJ del martes incluye lo siguiente:

“Hemos vivido un año lleno de acontecimientos importantes, incluidos los conflictos de la Tercera Guerra Mundial. En medio de todo esto, ha habido una resistencia generalizada por parte del pueblo. A lo largo del año, el pueblo del noreste de Siria y las fuerzas de defensa demostraron una vez más la determinación de nuestro pueblo contra todas las formas de ataques colonialistas y genocidas, reafirmando su determinación de vivir libres e iguales. Cada año se recibe con esperanzas de paz, tranquilidad y amor. Sin embargo, las fuerzas de ocupación intentan reprimir estas esperanzas con sus violaciones inhumanas.

Como Unidades de Protección de la Mujer (YPJ), resistimos todas las amenazas que impiden a las mujeres y a las comunidades vivir libremente en todos los ámbitos. Estamos comprometidas en una lucha por la existencia.

Los recientes acontecimientos en la región han marcado el inicio de una nueva etapa, especialmente para las mujeres y la población. Esta etapa ha intensificado las crisis políticas y sociales en la región. Nos encontramos en un momento difícil en el que las personas son sometidas a tortura física y presión psicológica debido a sus identidades culturales y creencias religiosas y son asesinadas de manera brutal. Lo que sostiene a las comunidades es su diversidad cultural, religiosa y étnica. Comunidades como los alauitas, los cristianos y los drusos se enfrentan a la aniquilación. De manera similar, nuestra región en el noreste de Siria es blanco de ataques planificados que tienen como objetivo la ocupación y el exterminio.

En respuesta a estas violaciones y a las políticas dirigidas contra las naciones, las culturas y las creencias, la protección de los valores sociales se convierte en nuestra misión primordial. En la nueva Siria, los derechos y la seguridad de todas las identidades culturales, religiosas y nacionales deben estar garantizados legalmente. Las mujeres y las comunidades deben vivir en seguridad y libertad. Por lo tanto, la necesidad de defenderse y protegerse es mayor que nunca.

En la nueva Siria, es necesario institucionalizar todos los derechos de las mujeres, que se ejercen concretamente en las regiones autónomas. La igualdad de género, la representación justa en los sistemas de gobernanza compartida y las alianzas sociales deben ser fundamentales. Con este enfoque, Siria puede convertirse en un modelo democrático y dinámico para Oriente Medio.

Las Unidades de Protección de la Mujer (YPJ) dan la bienvenida al año 2025 en los frentes de resistencia para proteger los logros de la revolución. Del mismo modo, nuestro valiente pueblo se mantiene firme al lado de sus hijos e hijas.

Al comienzo de cada nuevo año, vemos renovadas esperanzas. Con la esperanza de que 2025 sea un año de paz, libertad y democracia para todos los pueblos de Siria, conmemoramos a todas las mártires de la libertad a través del legado de Ronahî, Arjîn, Yıldız y Avaşîn. Reafirmamos nuestro compromiso inquebrantable de seguir el camino de los mártires justos. Como YPJ, extendemos nuestros saludos para el nuevo año, en primer lugar y sobre todo a los arquitectos de la vida libre, al líder Apo, a todas las mujeres del mundo, a nuestro pueblo, a nuestros compañeros que actualmente resisten en las líneas del frente y a todas las familias de los mártires”.