Las fuerzas armadas turcas y sus mercenarios yihadistas aliados continúan cometiendo crímenes contra la humanidad en el Cantón de Afrin en Norte de Siria, que se encuentra bajo ocupación turca.

Según un informe por la agencia de noticias de Rojava Hawar (ANHA), una fuente de la aldea de Meydanke en el distrito de Rajo de Afrin, el cual ha pedido permanecer en el anonimato por razones de seguridad, ha afirmado que este domingo las fuerzas turcas y sus aliados mercenarios han demolido con maquinaria las casas de los residentes en la aldea de Semala, que se encuentra a 40 km al norte de Afrin.

Según la misma fuente, las fuerzas invasoras han talado olivos y destruido viñedos en la aldea de Meydanke. Los invasores, por otro lado, también han asaltado casas del distrito de Mabeta y han secuestrado a un grupo de jóvenes que fueron luego torturados mientras se encontraban en cautiverio.

Según los informes, una persona de origen turco con el nombre de Hüseyin Çiçek, el cual vive en el barrio de Ashrafiyah de Afrin, fue secuestrado por los grupos mercenarios hace dos días y llevado a la ciudad turca de Antep.

Los informes, obtenidos de fuentes locales, sugieren que se están dando conflictos internos de forma diaria entre los propios mercenarios yihadistas que operan bajo ordenes del ejército turco. Las fuentes afirman que se produjo un enfrentamiento entre estos grupos de yihadistas mercenarios debido a un desacuerdo sobre como repartirse las posesiones que habían saqueado al sur de Mabeta. Durante el enfrentamiento se usaron armas lo cual dejó a una civil llamado Emina Mustefa Şabo herida.