Decenas de miles de ciudadanos de Afrin se vieron obligados a emigrar después de la invasión de sus tierras llevada a cabo por el estado turco y sus aliados mercenarios.

Una gran parte de los ciudadanos desplazados han sido reubicados en Shehba. Después de la llegada de los ciudadanos, el Cantón de Shehba comenzó inmediatamente a trabajar para aumentar la cantidad de agua potable. De hecho, el agua es uno de los principales problemas cuando se produce una sobrepoblación repentina.

Debido a los constantes ataques en la región, el cantón se enfrentó a muchas dificultades y carencias y el problema del agua sigue siendo importante.

Uno de los principales objetivos del ISIS durante los fuertes ataques fue, de hecho, dañar la red de agua de la región.

Generadores, el cableado y muchos otros materiales de infraestructura fueron destruidos por las bandas jihadistas que no respetaban ni la vida humana.

El daño a una gran parte de su infraestructura hizo que fuera particularmente difícil suministrar agua potable a la zona.

Nuevos proyectos

La administración del Cantón de Shehba comenzó a trabajar para resolver el problema del agua a muchos barrios. Lo primero que hizo fue abrir nuevos pozos. Se proporcionó un generador y otros suministros y se reparó a la red de agua.

Los nuevos proyectos comenzaron en la provincia de Ehres. El pozo proporciona agua a Ehres, Til Qerah y Til Sosin.

Mihemed Elo, copresidente del Cantón de de Shehba, dijo a la agencia de noticias ANHA que trataron de resolver los problemas, pero se encontraron con muchos obstáculos ya que el cantón estaba bajo ataque constante.

Mihemed indicó también que la escasez de agua se acentúa debido al poco acceso que tienen a combustible.