A medida que aumenta el número de desplazados internos de las áreas ocupadas por Turquía en el norte de Siria, también se reciben más informes cada vez más impactantes de lo que sucede en esas regiones. Después del informe recibido el jueves pasado sobre EA, quien fue torturada junto con su hija durante un año entero en un centro de tortura en Afrin, hoy su madre, MA de 50 años, relata su historia.

Secuestro, tortura, saqueo y expulsión

En junio de 2019, MA fue secuestrada por la "policía militar" de las fuerzas de ocupación en Afrin con el pretexto de que ser miembro de una comuna responsable de su vecindario. Sin saber que su hija y su nieta también habían sido secuestradas, fue llevada al infame centro de tortura en la escuela comercial de Afrin. Se sorprendió al encontrar a los miembros de su familia allí. Lamentablemente fue torturada durante 26 días. Finalmente fue liberada a cambio de un rescate de mil dólares. Luego trató de sacar a su hija y nieta del cautiverio también. Pero el horror no había terminado. Después de que la familia pagó el rescate de su hija y su nieta y fueron liberadas, los yihadistas irrumpieron en su departamento y saquearon todo lo que quedaba allí. Robaron el último centavo que tenía la familia.

"Ancianos, mujeres o niños, todos son torturados"

MA habló con ANHA y contó su historia:

"Abu Haydar, Abu Arab, Abu Sayir y Abu Ziyad llevaron a cabo el interrogatorio de las personas secuestradas. Me interrogaron durante horas todos los días. Constantemente me preguntaban cuál era mi papel en la comuna y cuál era mi relación con la administración autónoma. Cuando dije que no tenía nada que ver con eso y que no trabajaba en la comuna, me golpearon con una manguera. Debido a mi edad, no esperaba ser sometida a una tortura tan severa.

"No podía dormir por la noche debido a los gritos de los torturados"

La tortura comenzó a medianoche y duró hasta las 4:00 a.m. Todas las noches se llenaron con los gritos de niños y mujeres torturados. Debido a los gritos no podía dormir. Las mujeres fueron torturadas por un hombre llamado Ahdar Ibrahim. Ahdar los colgó en una habitación y les dio descargas eléctricas".

Drogas y violación

Cientos de mujeres son torturadas en las prisiones de Maratê, la escuela comercial, y en la Prisión de Kawa. En la prisión de Kawa, los delitos más graves se cometen contra civiles, especialmente mujeres. En estas cárceles, las mujeres son violadas y drogadas.

"Los altos impuestos funcionan como extorsión a las familias"

Los mercenarios extorsionan con altos impuestos de las familias. Por lo tanto, las familias ni siquiera se atreven a cocinar buena comida en casa. Sus líneas eléctricas son robadas una y otra vez. Para recuperarlas, se les pide a las familias que paguen mucho dinero. Al mismo tiempo, obligan a las personas a usar dólares y liras turcas. En las farmacias, los medicamentos solo están disponibles con lira turca. Todos reciben documentos de identidad turcos.

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