Tras la publicación de un informe de la ONU sobre las catastróficas condiciones del campo de Hol, la Administración Autónoma del Norte y Este de Siria emitió una declaración. Según el informe de la ONU, actualmente hay 62.000 personas en el campo de Hol, muchas de ellas menores de doce años. La Administración Autónoma acoge con satisfacción la investigación de la ONU sobre las condiciones del campo y al mismo tiempo advierte de un mayor deterioro, en particular en relación con la situación de seguridad en el campo.

"Las condiciones pueden empeorar"

"El Estado Islámico sigue activo", dice el comunicado. "Por lo tanto, las condiciones en el campamento pueden empeorar aún más". La Administración Autónoma advierte que no está en condiciones de proporcionar suficientes suministros para el propio campamento y continúa: "Todo el mundo tiene que ocuparse de este problema. Tras la invasión de Serêkaniyê y Girê Spî por parte de Turquía, el ISIS aumentó sus actividades. Esta situación tuvo un claro impacto negativo en la situación del campo. Las mujeres vinculadas al ISIS celebran "juicios" en el campo y llevan a cabo castigos. Sus relaciones con el Estado Islámico continúan. Por ello, las fuerzas de seguridad del campamento han llevado a cabo una serie de acciones".

"La atención a los niños y adolescentes es poco viable"

En cuanto a la situación de los menores, la Administración autonómica dice: "Ningún niño o joven está siendo retenido en el campamento por la fuerza. Serán atendidos". Las mujeres del ISIS, sin embargo, siguen manteniendo sus vínculos con la organización. Se ha creado un espacio, aunque limitado, para los niños. Allí reciben apoyo psicológico. Pero el número de niños es muy elevado, por lo que ofrecer una atención integral es casi imposible para la Administración."

"Sólo se puede garantizar la seguridad si la comunidad internacional es solidaria"

La Administración autonómica criticó a las instituciones internacionales por la falta de apoyo y concluyó su comunicado diciendo que "la comunidad internacional tiene que ser solidaria para garantizar el control y la seguridad del campamento. Este campamento afecta a toda la comunidad internacional, así como a la ONU. Los Estados cuyos ciudadanos están retenidos aquí también deberían apoyar a la Administración Autónoma".