El cantón de Afrin, que está ocupado por los militares turcos y los grupos del FSA (Ejército Libre Sirio), está sujeto a reglas similares a las introducidas por el ISIS en su antigua "capital" en Raqqa. Según fuentes locales, las mujeres en Afrin ahora tienen prohibido salir de la casa sin velos negros y acompañantes masculinos.

Más de 300 civiles muertos

El ejército turco y sus mercenarios del FSA asesinaron a más de 300 personas de la población civil, incluidas 56 mujeres y 46 menores, a partir del 20 de enero, bajo el nombre cínico de Operación Rama de Olivo. La población del cantón sirio septentrional resistió al segundo ejército más grande de la OTAN, y la milicia jihadista que reclutó el MIT turco, durante 58 días. Cuando las fuerzas de ocupación se encontraban a las afueras de la ciudad de Afrin, el 18 de marzo, la mayor parte de la población fue evacuada a Shehba, el cantón vecino.

Afrin anexado a Turquía

Después de la ocupación del centro de la ciudad de Afrin, se fundó el 19 de marzo, en Antep, el "Consejo de Afrin", cuya coordinación está a cargo del Gobernador de Hatay. Por lo tanto, Afrin ha sido efectivamente anexado por Turquía. Para Afrin se designará un gobernador seleccionado por Ankara.

Secuestros y violación

Las acciones de la potencia ocupante en Afrin y en las aldeas de la región, sometieron a la población a una presión extrema. Las mujeres son  particularmente afectadas por el régimen, que cumple con los estándares establecidos por el ISIS. Los secuestros y la violencia sexual son comunes. Se desconoce qué ha pasado con las mujeres secuestradas por la milicia. También hay secuestros reales con demandas de rescate en su lugar.

Las aldeas están arabizadas

Según el Consejo Democrático de Siria (MSD), aproximadamente 4.000 familias de la milicia del FSA se han establecido en la ciudad y las aldeas. La aldea de Kafr Jina, en el distrito de Shera, ha sido completamente arabizada. Al menos 300 familias se han establecido solamente en la aldea de Kafr Safra.