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Un joven yazidí muere en un ataque aéreo turco en Shengal

La Administración Autónoma de Shengal anunció que un joven llamado Kerim Hecî Şero fue asesinado en el ataque aéreo hoy, por parte del estado turco.

Un vehículo de combate aéreo no tripulado (UCAV) atacó un automóvil en la ciudad yazidí de Shengal (Sinjar) en la región del Kurdistán de Irak el día de hoy.

El conductor del vehículo perdió la vida como consecuencia del ataque mientras se dirigía a la región de Serdesht.

La víctima fue identificada como Kerim Hecî Şero, un joven yazidí de la tribu zendini. Procedía del distrito de Tilizêr y vivía en el subdistrito de Sinûnê en Shengal.

El cuerpo del joven fue trasladado del Hospital Sinûnê a Medicina Forense de Mosul para la autopsia.

Los ataques turcos a Shengal no se detienen desde 2017

Desde 2017, aviones de guerra y drones turcos llevan a cabo repetidos ataques aéreos contra Shengal con el pretexto de “combatir al PKK”. Los objetivos específicos son, en su mayoría, instituciones fundadas tras el genocidio cometido por el ISIS, como el órgano administrativo “Consejo Autónomo Democrático de Shengal” (MXDŞ) o las unidades de autodefensa YBŞ e YJŞ. Las víctimas son, en su mayoría, civiles, a menudo supervivientes del genocidio de 2014.

En una ola de ataques con aviones de guerra y vehículos aéreos no tripulados, el estado turco bombardeó un total de 16 puntos en Shengal, entre el 24 y 25 de octubre, matando a seis combatientes de las Unidades de Resistencia de Shengal (YBŞ).

El 8 de julio, el vehículo de los periodistas que se dirigían a la ciudad de Til Qeseb, en Shengal, para realizar entrevistas sobre el décimo aniversario del genocidio del 3 de agosto de 2014, fue atacado en el centro de Shengal cuando regresaban. El reportero de Çira TV Medya Hasan Kemal, el reportero de Çira FM Murat Mirza Ibrahim y el conductor del vehículo Xelef Xidir, junto con otras tres personas que se encontraban en el lugar, resultaron heridos en el ataque. 

El 8 de marzo, otro ataque aéreo turco mató a Mecdel Hesen Xelef, comandante de las Unidades de Resistencia de Shengal (YBŞ) y sobreviviente del genocidio del ISIS en 2014. El dron bombardeó un puesto de control cerca de Til Êzêr donde estaba trabajando. Tenía 32 años tenía esposa y un hijo.

Unos días antes, un dron turco asesinó en Shengal al civil Sadun Mirza Ali, padre de tres hijos y conductor del comité de la administración autónoma para los mártires. A finales de diciembre, cinco trabajadores de Rojava murieron en un ataque con drones en Shengal.

La zona de asentamiento yazidí de Shengal, en la región del Kurdistán iraquí, es la última zona de asentamiento contigua de la comunidad yazidí. Miles de yazidíes fueron asesinados y miles de mujeres y niños fueron hechos prisioneros en el ataque del 3 de agosto de 2014 en Shengal por militantes del ISIS. Mientras las bandas del ISIS comenzaban a asesinar a yazidíes en Shengal, los peshmerga se marcharon, dejando a los yazidíes atrás, desprotegidos. Las guerrillas de las HPG (Fuerzas de Defensa del Pueblo) y las YJA Star (Tropas de Mujeres Libres) y los combatientes de las YPG (Unidades de Defensa del Pueblo) y las combatientes de las YPJ (Unidades de Defensa de las Mujeres) acudieron en ayuda del pueblo yazidí frente a la agresión del ISIS. Gracias a una lucha intensa que duró meses, la ciudad fue liberada el 13 de noviembre de 2015. Después de la liberación de la ciudad, las HPG y las YPG/YPJ se retiraron posteriormente en 2017. La gente que regresó a su tierra después de la independencia de Shengal establecieron unidades defensivas y construyeron sus instituciones.

El Estado turco, frustrado por la liberación de Shengal y la organización militar y política de la comunidad yazidí tras el ataque genocida del ISIS en 2014, lleva siete años atacando Shengal. Los ataques de Turquía que violan el derecho internacional son habituales en el sur del Kurdistán desde hace años. La fuerza aérea turca bombardea el territorio de la región del Kurdistán e Irak casi a diario, sobre todo donde se sospecha que hay guerrilleros. Sin embargo, las zonas de asentamientos civiles también son objeto de ataques periódicos por parte del ejército turco, incluida la zona de asentamiento yazidí de Shengal y el campo de refugiados de Makhmur. Con su terror aéreo, Ankara aplica una política selectiva de desplazamiento, en particular mediante la destrucción deliberada de infraestructuras civiles.

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