Ante cientos de invitados hoy 550 estudiantes recibieron sus diplomas como profesores de lengua kurda para la educación primaria y secundaria. En un ambiente festivo, el Comité de Educación del cantón sirio septentrional de Hesekê entregó sus certificados a los nuevos profesores de kurdo que completaron con éxito sus estudios en la academia "Şehîd Roza Cûdî" de Dirbêsiyê. Además de numerosos profesores y representantes de la sociedad civil, también participaron en la ceremonia personalidades de la política.

Debido a la política colonial de los estados-nación de la región, que han dividido al Kurdistán entre ellos y siguen una política de asimilación y represión contra los kurdos, el kurdo casi acabó en la lista de lenguas muertas. En Rojava, sin embargo, se está dando un giro de 180 grados.

Tras la revolución en Rojava y la consiguiente construcción de una vida democrática común de las diferentes identidades de la región, los consejos de educación han comenzado a aplicar un plan de educación en lengua materna en 2015. Los libros de texto de lengua kurda ya están disponibles desde el primer al duodécimo grado. Un objetivo prioritario de las universidades de Rojava es el uso del idioma kurdo en la ciencia.

Hasta hace unos años, el kurdo apenas tenía la oportunidad de desarrollarse como lengua escrita en la región. Sin embargo, más recientemente han surgido oportunidades históricas para el desarrollo del idioma kurdo, primero en el Kurdistán del Sur y luego en Rojava y en el norte de Siria. El dialecto kurmanci, utilizado por la mayoría de la población kurda, se ha convertido sistemáticamente en un idioma educativo por primera vez.