El arte y la cultura kurdos siguen desarrollándose a pesar de la enorme presión. La labor cultural, cuyos cimientos se sentaron a principios de los años 90, permitió el uso de la lengua kurda en la esfera pública y aumentó la conciencia nacional actual.
Özcan Ateş es uno de los actores del Teatro de la Ciudad de Amed. Desde ANF hemos hablado con él sobre la importancia del teatro en kurdo y la respuesta que obtienen cuando representan obras en kurdo: "Podemos tener buenas oportunidades dentro del sistema, pero cuando no te valoran ante el público, tu trabajo no importa".
El público está abierto a las innovaciones
Ateş dijo que si un grupo de teatro demuestra su competencia con sus obras y se impone a la sociedad, puede arrastrar al público a seguirlo. Ateş añadió que, aunque representen una obra en turco, siempre presentan una historia que atrae a la sociedad por su contenido. Dijo que siempre tocan temas sociales en las historias que representan. "En principio, no producimos obras en turco, pero para quienes no hablan kurdo, una vez al mes traemos compañías de teatro que actúan en turco. Aquí siempre hacemos obras en kurdo. Los kurdos tienen un sentido del humor muy profundo. El pueblo kurdo lleva años luchando, están abiertos a las innovaciones y a la experimentación. Tienen la conciencia necesaria para conocer el impacto de la cultura y el arte.".
Hacer teatro a pesar de las dificultades
Ateş contó también que lleva 20 años dedicado al teatro y añadió: "Hacemos teatro en kurdo e intentamos proteger nuestra cultura. En 2016, fueron nombrados en el municipio fideicomisarios. Querían dispersarnos después de echarnos del municipio. Su objetivo era dirigirnos hacia obras turcas. Había algunas instituciones en Europa que intentaban crear oportunidades para que hiciéramos teatro en Europa apoyándonos. Pero nosotros y nosotras queríamos quedarnos aquí y continuar con nuestra cultura y nuestro arte en nuestra propia lengua, con nuestros valores y principios. No cerramos nuestras puertas a quienes querían apoyarnos. Dijimos a quienes se ofrecían a ayudarnos en el extranjero que consideraran la posibilidad de ayudarnos a permanecer en Amed".
Los artistas son la vanguardia de la sociedad
Ateş subrayó que es consciente de la importancia de hacer teatro en kurdo y agregó: "Por ejemplo, tuve un profesor que quería que yo y mis amigos, como Yavuz Akkuzu, entráramos en el mercado de Estambul, porque así aumentaría nuestro reconocimiento. Incluso nos propuso ser nuestro manager. Rechazamos esta oferta. Los artistas son la vanguardia de la sociedad. Ahora bien, si damos la espalda por un pequeño o gran problema, en realidad perderemos nuestra vena artística. Por lo tanto, intentaremos proteger y desarrollar el teatro kurdo dentro de los límites de nuestras posibilidades. Hoy podemos trabajar en el sistema y tener buenas oportunidades, pero cuando te presentas ante el público y no ves ningún valor, el trabajo que haces no importa".