Mina Soltani, la madre de Shahriar Mohammadi, una manifestante asesinada durante el levantamiento antigubernamental "Jin, Jiyan, Azadi" (Mujer, Vida, Libertad) en 2022 en Bukan, ha sido condenada a ocho meses de prisión y multada con 10 millones de riales, informó la Red de Derechos Humanos del Kurdistán (KHRN).
La Sección 101 del Segundo Tribunal Penal de Bukan condenó a Soltani por cargos de “propaganda contra el Estado” y “presencia de mujeres en espacios públicos y a la vista de todos sin el hijab islámico”.
Según información obtenida por la Red de Derechos Humanos del Kurdistán, su juicio tuvo lugar el 15 de febrero en la Sección 101 del Segundo Tribunal Penal de Bukan, presidido por el juez Mehdi Fakhri.
La audiencia se llevó a cabo sin abogado defensor y el veredicto le fue entregado oralmente en los últimos días, según supo KHRN.
En los últimos dos años, Soltani ha sido citado, arrestado y amenazado repetidamente por las fuerzas de seguridad.
El 11 de septiembre de 2024, fue detenida sin orden judicial en su domicilio de Bukan y permaneció recluida en la sección de mujeres de la prisión central de Orumiyeh durante 21 días antes de ser puesta en libertad bajo fianza.
Durante su detención en el centro de detención del Ministerio de Inteligencia en Orumiyeh, provincia de Azerbaiyán Occidental, se le negó el acceso a representación jurídica y a visitas familiares.
Su hijo, Shahriar Mohammadi, recibió disparos y resultó herido por las fuerzas de seguridad durante las protestas antigubernamentales en Bukan el 18 de noviembre de 2022, y luego murió en el hospital debido a sus heridas.