¿Dónde está Gökhan Güneş?

El activista Gökhan Güneş fue secuestrado por un grupo de gente desconocida hace alrededor de tres días cuando se dirigía a su trabajo. El secuestro fue filmado por las cámaras de seguridad, pero la policía no está haciendo nada.

Han pasado cerca de 72 horas desde que secuestraron al activista Gökhan Güneş en Estambul. Sin embargo, y a pesar de las filmaciones de las cámaras de seguridad en las que puede verse el secuestro del joven de 23 años, la policía permanece inactiva.

“No hay motivos para esta pasividad”, dicen los allegados de Güneş. Ellos sospechan que las fuerzas de seguridad están detrás del secuestro. “Gökhan ya fue víctima de un intento de secuestro por parte de las fuerzas estatales en el pasado. Creemos que esta vez tuvieron éxito”, ha declarado su hermana Gülhayat Toraman. La familia contactó con la Asociación de Derechos Humanos (IHD) el viernes para pedir ayuda.

Qué se sabe sobre el secuestro

Gökhan Güneş trabaja como electricista. El miércoles a las 12:20 pm se subió en el autobús 79 FY en el distrito de Ikitelli para ir a Başakşehir, donde trabaja. Después de bajarse en la parada ‘Escuela Elemental Şehit Abdülselam Özatak’, entre cuatro y cinco personas le rodearon y le arrastraron hasta un vehículo que, acto seguido, se alejó a toda velocidad junto con otro vehículo más. En las imágenes de una cámara de vigilancia también se puede ver a los transeúntes observando el incidente.

Los padres de Gökhan Güneş han contactado con la policía y el Centro Antiterrorista de Estambul numerosas veces desde el miércoles para denunciar el secuestro, pero sin éxito. Las grabaciones de las cámaras de vigilancia, que la familia pudo obtener y que entregó a la policía, “acabaron en un cajón”. Según Gülhayat Toraman, incluso se habría iniciado una investigación policial sobre la difusión de las grabaciones.

Miedo a volver a la década de los 90

“Cuando vemos las imágenes del secuestro de Gökhan Güneş, nos preocupa que el periodo negro de la década de los 90 haya vuelto”, declaró Gülseren Yoleri, presidenta de la IHD en Estambul, en una rueda de prensa junto a los diputados del Partido Democrático de los Pueblos (HDP) Musa Piroğlu y Ali Kenanoğlu.

Tras el golpe militar de septiembre de 1980, Turquía comenzó a practicar las “desapariciones forzosas”. En medio de los 90, cuando la guerra sucia del Estado turco contra el PKK se encontraba en su máximo auge, estas desapariciones alcanzaron su punto álgido. Se calcula que se hicieron “desaparecer” a más de 17.000 personas por “autores desconocidos”; es decir, por fuerzas estatales paraestatales.