Hoy las Madres del Sábado salieron a las calles por 971ª vez

Las Madres de los Sábados hace décadas que salen a las calles por sus familiares desaparecidos bajo custodia del Estado, exigiendo esclarecimiento y castigo de los perpetradores.

Durante más de 28 años, las Madres de los Sábados han estado exigiendo información sobre sus familiares desaparecidos bajo custodia policial. Se trata de la acción de desobediencia civil más larga de Turquía, que comenzó el 27 de mayo de 1995 con la sentada de la familia de Hasan Ocak, un profesor asesinado por tortura. Se estima que 17.000 personas, entre ellas periodistas, políticos y activistas de derechos humanos, "desaparecieron" en Turquía en las décadas de 1980 y 1990, principalmente en las regiones kurdas. A menudo sus cuerpos eran arrojados en fosas comunes secretas en bases militares, pero también en vertederos de basura o en pozos. Ni la policía ni el poder judicial han tomado ninguna medida para investigar los "asesinatos sin resolver".

Desde la resistencia de 2013 en el parque Gezi de Estambul, las protestas han sido prohibidas en la plaza frente a la escuela secundaria Galatasaray. Solo a las Madres de los Sábados se les permitió seguir protestando aquí. Pero con la acusación de "cercanía al PKK", la vigilia número 700 de la iniciativa fue prohibida y dispersada violentamente el 25 de agosto de 2018. Desde entonces, todas las protestas en la plaza Galatasaray han sido prohibidas. Pero esto es contrario al derecho a la libertad de reunión y manifestación, como lo dictaminó el Tribunal Constitucional turco el 22 de febrero de 2023, rechazando la objeción del ministerio de que las Madres de los Sábados amenazaban la "protección del orden público".

 

"Toda persona tiene derecho a participar en reuniones y manifestaciones pacíficas y sin armas sin permiso previo", dice el artículo 34 de la Constitución turca, que las autoridades de seguridad violaron con su orden de prohibición de la acción de las Madres del Sábado, dispersadas por la fuerza, en agosto de 2018 y en todas las posteriores. Por lo tanto, el bloqueo de la plaza es inválido. Sin embargo, el Ministerio del Interior turco y las autoridades de Estambul ignoran la sentencia y llevan meses atacando violentamente a las Madres de los Sábados y a sus simpatizantes.

Las Madres de los Sábados y quienes las acompañan se enfrentaron a una nuevo cerco y asedio por parte de la policía en la semana 971 de su acción, mientras que las y los periodistas fueron rechazados y se les impidió hacer su trabajo.

La resitencia y persevernacia de los defensores de los derechos humanos les permitió superar el bloqueo policial y dejar claveles en la Plaza Galatasaray, tras lo cual abandonaron el lugar. Luego el grupo hizo una declaración a la prensa en la sección de Estambul de la Asociación de Derechos Humanos (IHD).