Según ha explicado la ONU, hay un número récord de civiles muertos y heridos en Afganistán desde el 1 de mayo, cuando las fuerzas internacionales iniciaron su retirada final y los talibanes lanzaron una gran ofensiva.
La ONU ha señalado en un informe que si el conflicto se extendiera a pueblos y ciudades más densamente poblados, las consecuencias podrían ser catastróficas.
La ONU ha publicado un informe titulado ‘La protección de los civiles en los conflictos armados’, el primer relato a nivel nacional del impacto de los combates sobre los civiles.
El informe registra niveles casi récord de víctimas civiles en los primeros seis meses del año, siendo los grupos insurgentes responsables de más de la mitad de los muertos y heridos. Asimismo, señala que el “agudo aumento” en los dos meses transcurridos desde el 1 de mayo es especialmente preocupante. En ese periodo, 783 civiles perdieron la vida y 1.609 resultaron heridos, lo que supone casi las mismas cifras alcanzadas durante los cuatro primeros meses del año, y las más altas desde que la ONU comenzó a llevar registros en 2009.