Noticias de ultima hora: Manbij resiste una nueva ofensiva lanzada por el ejército turco y sus bandas desde tres ejes Rusia confirma la salida de Assad de Siria

ONG advierte de una oleada de desplazamientos en el Kurdistán Sur

A consecuencia de las operaciones de ocupación turca, algunas zonas de la región iraquí del Kurdistán podrían sufrir pronto una importante oleada de desplazamientos.

Invasión turca

Turquía está penetrando cada vez más profundamente en el territorio de la Región del Kurdistán de Irak (KRI). Según informó el domingo la ONG local Community Peacemaker Teams (CPT), la ofensiva de ocupación turca llamada Operación Cierre de Garra, que se amplió a partes del distrito de Amêdî a mediados de junio, se extiende ahora quince kilómetros hacia el interior. En la anterior Operación Garra Relámpago y Rayo, que duró de abril de 2021 a abril de 2022, las tropas de ocupación avanzaron siete kilómetros en la región y se establecieron en la aldea de Hiror (Hrure) al no poder romper el frente de la guerrilla del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK). Para superarlo, ahora el ejército turco está reforzando las más de 70 bases militares que tiene en la KRI, violando el derecho internacional, y está construyendo siete nuevas bases, que se concentran en el subdistrito de Kanî Masî, en Barwarî Bala, que pertenece a Amêdî. La población de varias aldeas ya ha sido desplazada en las últimas semanas a consecuencia de esta violencia militar en la región fronteriza kurda del sur, y ahora otras aldeas están amenazadas con correr la misma suerte, con el beneplácito del Partido Demócrata del Kurdistán (KDP) de Barzanî, aliado de Turquía.

Panorama de la evolución actual en el KRI en el contexto de la "Operación Cierre de Garra" © CPT

600 pueblos amenazados de desalojo

Al menos 602 pueblos de la región iraquí del Kurdistán corren actualmente riesgo de desalojo forzoso como consecuencia del expansionismo turco. CPT también confirmó esta cifra y nombró 162 pueblos cuyas poblaciones ya han sido desplazadas desde el inicio de las "operaciones garra" turcas a principios del verano de 2020. Para lograr el objetivo a largo plazo de destruir el estatus autónomo de la región del Kurdistán y asegurar el control de Turquía sobre zonas de importancia estratégica en el norte de Irak, se están produciendo ataques selectivos del ejército turco contra asentamientos civiles, además de bombardeos permanentes contra zonas de la guerrilla bajo el pretexto de la seguridad fronteriza y de una supuesta "amenaza terrorista" para Ankara. Según el informe de CPT, sólo en las últimas tres semanas, el ejército turco ha llevado a cabo al menos 238 bombardeos contra zonas de asentamientos, principalmente en la gobernación de Duhok. Como resultado de estos ataques, se han quemado más de 2.000 hectáreas de tierras agrícolas, principalmente en las aldeas de Amêdî. Sólo en el pueblo de Sergelê, alrededor del 55% de todas las tierras cultivadas y utilizables para productos agrícolas, así como las zonas boscosas, han sido víctimas de la política de tierra quemada de Turquía.

Ocho civiles muertos en 2024

Los más de 230 ataques de las últimas semanas forman parte de los al menos 1.076 bombardeos del ejército turco registrados por CPT entre enero y julio en zonas de asentamiento de toda la KRI. Casi el cincuenta por ciento de estos ataques se dirigieron contra objetivos en Duhok, donde se encuentra el distrito de Amêdî. Algo más de 400 ataques tuvieron como objetivo regiones de Hewlêr (Erbil), las bombas turcas cayeron 135 veces en la gran zona de Silêmanî y más del 90% de todos los ataques fueron llevados a cabo por aviones de combate. Según los datos disponibles de CPT, ocho civiles han muerto desde principios de año a consecuencia de la violencia militar turca y decenas han resultado heridos. Además, gran parte de las infraestructuras civiles de las zonas afectadas han sido destruidas o han sufrido graves daños.

Monasterio bombardeado, escuela destruida

A finales de febrero, aviones de guerra bombardearon hasta reducirla a escombros una escuela del pueblo de Mizê (Mizhe). En el pueblo de Miska, que, al igual que Mizê, pertenece a Amêdî, los aviones bombarderos dañaron un monasterio asirio hace aproximadamente una semana. Y en la cercana Guherzê (Guharz), las fuerzas de ocupación dispararon recientemente proyectiles de artillería contra tres viviendas y un coche en dos noches consecutivas. "Como Equipos Comunitarios de Pacificación, estamos profundamente preocupados por esta escalada de las operaciones militares turcas y por los daños asociados a la población civil y a las infraestructuras civiles", afirma el informe de CPT. La organización teme que, si continúan las operaciones del ejército turco en el Kurdistán Sur, miles de personas se vean desplazadas sin opción de retorno.

Noticias relacionadas: