Evin Cuma, una de los directivos de la Organización Siria de Derechos Humanos, calificó los ataques del Estado turco como "crímenes de guerra" y pidió a la Comisión Internacional Independiente de Investigación de la ONU que tome medidas.
El Estado turco ocupante cometió una masacre ayer (8 de diciembre) cuando 12 civiles, en su mayoría mujeres y niños, murieron en un ataque con aviones no tripulados en la aldea de Misteriha, en Ayn Issa.
En declaraciones a ANHA, Evîn Cuma, una de los directivos de la Organización Siria de Derechos Humanos, declaró que el Estado turco y sus grupos ya habían llevado a cabo masacres similares antes.
Cuma afirmó que el Estado turco ocupante ataca los servicios e instituciones públicas de la región y masacra a civiles, y que pretende despoblar la región con estos ataques: “El Estado turco viola el derecho internacional. Además de los ataques actuales, este hecho es más visible en Afrîn, Serêkaniyê y Girê Spî”.
Evîn Cuma destacó que atacar a civiles es un crimen de guerra según la Declaración Universal de Derechos Humanos y pidió a las Naciones Unidas y a la Comisión Internacional Independiente de Investigación que identifiquen los crímenes de guerra del Estado turco ocupante e impongan los castigos necesarios.
Cuma pidió al Consejo de Seguridad de la ONU que presione a Turquía para que detenga su agresión contra Siria.
