Un grupo de jóvenes activistas miembros del Comité de Resistencia Internacionalista han celebrado un acto de conmemoración de la Revolución de Rojava y de la Revolución Social del 36, dos revoluciones que comparten aniversario en el 19 de julio.

Los activistas han realizado una ruta por la Serra de Collserola en la capital principatina que ha acabado en la Ermita Sant Medir. La sierra por la que se ha realizado la ruta reivindicativa tiene un significado especial al ser uno de los lugares en los que se refugiaban los maquis (la guerrilla que resistió a la dictadura franquista una vez acabada la guerra). 

También se rindió homenaje especial a maqui Josep Lluís Faceria, el cual se refugio precisamente en la ermita Sant Medir antes de ser asesinado en 1957.

A continuación reproducimos el comunicado del CRI:

"El pasado 18 de Julio de 2021 tuvo lugar en Barcelona un acto para celebrar el 85º aniversario de la Revolución Social de 1936 y el 9º aniversario de la Revolución de Rojava. Se realizó una caminata por la Serra de Collserola que fue refugio de maquis (guerrilla antifranquista) entre 1950 y 1957. El recorrido finalizó en la Ermita de Sant Medir que sirvió de cobijo al maqui Josep Lluís Facerias antes de ser asesinado por la Policía Franquista, el 30 de agosto de 1957 en Barcelona.  
En la ermita, se montó un altar en memoria de les mártires, se hicieron parlamentos, se leyeron textos y poesías y se cantaron canciones que tejían el hilo rojo entre las dos revoluciones, dotando de fuerza y significado el momento actual. Recogiendo la concepción espiral del tiempo, desde el legado de la Revolución de 1936 que sigue presente, nos iluminamos con el faro de esperanza de la Revolución de Rojava para seguir sus pasos. 
La Revolución de Rojava y la Federación Autónoma del Noreste de Siria que de esta revolución surge,  son  fruto de una larga lucha llevada a cabo por el movimiento de liberación de Kurdistán, liderado por el PKK y su guerrilla. Recogiendo el legado de las experiencias de revoluciones anteriores, lanzan la propuesta del confederalismo democrático, la liberación de las mujeres y la ecología social, como base desde la que acabar con el sistema de dominación, en Kurdistán y en el resto del mundo. Se trata de una llamada a despertar y desenterrar en nuestros territorios los cimientos éticos, organizativos y espirituales de las sociedades que existieron antes de la sistematización de la hegemonía. 
La defensa de la Revolución de Rojava, de Kurdistán y de la guerrilla, nos incube a todes. Tal y como la solidaridad internacionalista plantó cara al fascismo durante la guerra civil en la península Ibérica,   ahora somos nosotres, las que luchamos por la libertad en el presente, les que debemos movilizarnos en solidaridad con aquelles que en Kurdistán ponen sus cuerpos para abrir una brecha al sistema patriarcal, capitalista, imperialista y fascista que nos oprime.
¡Larga vida a la Revolución de Rojava!
¡Viva la resistencia de Kurdistán y de su guerrilla!

Comité de resistencia internacionalista (CRI). "