La comunidad siríaca realizó eventos conmemorativos del 108 aniversario del genocidio de Sayfo de 1915, en Turgi, Suiza.

Como parte de la conmemoración organizada por la Iglesia Ortodoxa Siria, se celebró una ceremonia religiosa en la Iglesia Católica de Gebenstrof. Durante la oración, presidida por los sacerdotes siríacos Michael Aziz y Kerim Asmar, se recitaron oraciones y se cantaron himnos.

En un breve discurso, el padre Michael Aziz dijo: "La región de Beth Nahrain es el hogar de kurdos, árabes, armenios, yazidíes y muchos otros pueblos. Los sirios eran la sal del plato hecho de esta región, que se quedó sin sal después de la masacre que sufrieron. En cada casa siríaca, hay una víctima de Sayfo. Debemos mantener vivos sus recuerdos para sobrevivir".

Aziz agregó: "La mentalidad genocida del Imperio Otomano y el estado turco, que perpetró la masacre de Sayfo, también se dirigió más tarde contra el pueblo kurdo. Para nuestro pesar, algunas tribus que colaboraron con el estado en ese momento también fueron sometidas a masacres después, al igual que lo que sucedió con los sirios. Esta mentalidad genocida aún persiste hoy en día. Nuestro pueblo asirio y siríaco está luchando por sobrevivir en el exilio, aferrándose a sus raíces. Sin embargo, no será fácil para ellos existir a menos que se aferren a sus raíces y recuperen su patria. Pueden traerse a la existencia sólo en sus propias tierras. Solo de esta manera el Sayfo puede ser verdaderamente compensado".

Después de la ceremonia, los sirios se dirigieron a la Asociación Cultural Siríaca en Turgi, donde realizaron otro evento de conmemoración.

Durante el evento aquí, el ex alcalde del municipio de Sur, Abdullah Demirbaş, el ex diputado del Partido Democrático de los Pueblos (HDP) Tuma Çelik, el funcionario religioso sirio Kerim Asmar y la directora de la película 'Kobanê', Özlem Yaşar, pronunciaron discursos.

Una declaración leída en nombre de la Unión Siríaca Europea (ESU) conmemoró los trágicos eventos del genocidio de 1915 contra las comunidades siríaca, armenia y griega póntica, y extendió saludos a quienes participaron en la conmemoración. La Unión Siríaca Europea rindió homenaje a las víctimas y denunció las atrocidades y el trauma sufrido por su comunidad.

La declaración destacó que los sirios eran un pueblo antiguo de Mesopotamia que hizo contribuciones significativas a la civilización a lo largo de la historia. Sin embargo, en 1915, el régimen otomano-turco bajo el Comité de Unión y Progreso, y sus aliados organizaron una campaña genocida contra nuestro pueblo, los armenios y los griegos pónticos. Durante el genocidio de 1915, más de dos millones de personas inocentes fueron brutalmente masacradas, cientos de miles fueron desplazadas por la fuerza, arrastradas a marchas de la muerte y convertidas al Islam. Su historia, riqueza, posesiones y propiedades fueron confiscadas. Además, el trauma infligido por el genocidio de Sayfo sigue afectando a nuestro pueblo. Aunque muchos países de todo el mundo han reconocido el genocidio de 1915, todavía hay un tremendo esfuerzo necesario para difundir e implementar su reconocimiento en otros países. En 1915, la población cristiana fue sistemáticamente aniquilada. Turquía sigue empleando métodos de depuración étnica en el país y en la región de Oriente Medio. Los sucesivos gobiernos turcos han negado el genocidio de 1915 y han tratado de obstruir la justicia a través de su influencia económica y política y actitudes maliciosas. Hoy en día, las poblaciones siríaca, armenia y griega en Turquía ascienden a menos de cien mil. Esto es el resultado del genocidio de 1915 y las posteriores políticas de limpieza étnica".

Expresando su demanda de reconocimiento del genocidio de Sayfo, ESU declaró: "Como cualquier otro pueblo, queremos protegernos de la amenaza de extinción, opresión y todas las formas de violencia. El enfoque humanitario mostrado a nuestro pueblo en el año 108 de 1915 es un reconocimiento oficial y aceptación de Sayfo. Hacemos un llamamiento a los líderes para que reconozcan el 15 de junio como el aniversario del genocidio siríaco".