La larga marcha en la ciudad sueca de Gotemburgo, que comenzó el sábado para denunciar la conspiración internacional y el aislamiento contra Abdullah Öcalan, concluyó ayer con una reunión.

Los manifestantes, después de recorrer 40 kilómetros, llegaron a la Plaza Brunnparken. en el centro de Gotemburgo. Los activistas aplaudieron consignas en apoyo de Abdullah Öcalan, Leyla Guven, y exigieron libertad y estatus político para el pueblo kurdo.

Abdullah Konya, copresidente del Centro de la Sociedad Democrática Kurda (NCDK) en Gotemburgo, pronunció un discurso en la reunión y criticó duramente a la Unión Europea y al gobierno sueco por su silencio frente a los ataques del Estado turco contra el pueblo kurdo.

Konya enfatizó que Leyla Guven estaba en el día 103 de una huelga de hambre para protestar por el aislamiento del líder del pueblo kurdo, Abdullah Ocalan, y exigió que el aislamiento se detuviera de inmediato y el PKK fuera eliminado de la lista de grupos terroristas.

Durante la marcha de dos días, los manifestantes cantaron canciones kurdas y lemas en apoyo de Abdullah Ocalan.