La organización paraguas kurda KON-MED ha reiterado la demanda de que se levante la prohibición del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en Alemania, impuesta hace treinta años.

En el comunicado, la KON-MED afirma que la prohibición del PKK dictada en 1993 carece de base jurídica y forma parte de las medidas acordadas internacionalmente contra el movimiento de liberación kurdo. Con ella, se creó por primera vez una cobertura oficial contra la libertad de organización y reunión de los kurdos y las kurdas en Europa: "Esta medida, puramente política y sin fundamento alguno, se convirtió en un proceso ilegal en Alemania, el país con mayor población kurda".

El 25 de noviembre tendrá lugar en Berlín una conferencia organizada por las asociaciones de Colonia AZADÎ y MAF-DAD con el título "30 años de prohibición de la actividad contra el movimiento kurdo por la libertad: levantar la prohibición del PKK - fortalecer la democracia".

Mecanismo de aplicación de las demandas turcas

Decenas de kurdos y kurdas han sido detenidos en Alemania en los últimos treinta años. La KON-MED continúa en su declaración: "De hecho, con esta práctica, que se formalizó como una prohibición del PKK, el Estado alemán se ha convertido en un mecanismo que cumple los deseos del Estado turco. El pueblo kurdo no tiene otro objetivo que ejercer sus derechos democráticos. La decisión de prohibir el PKK, que se ha utilizado como garrote contra los kurdos durante treinta años, es una vergüenza para Alemania. Y el pueblo kurdo ha rechazado esta injusticia y esta vergüenza con su resistencia. Por lo tanto, esta prohibición no tiene ya ninguna significación. El pueblo kurdo no reconoce esta decisión y no cederá en la lucha contra esta injusticia y arbitrariedad."

Provocaciones policiales

En cuanto a la manifestación celebrada el sábado, KON-MED afirma que miles de personas exigieron en Berlín el levantamiento de la prohibición del PKK a pesar de haber sido provocadas por una gran presencia policial.

Al parecer, los ataques policiales pretendían producir imágenes de "kurdos violentos" para justificar la prohibición del PKK. KON-MED subraya que este intento fracasó debido a la actitud tranquila de los manifestantes: "Las provocaciones de la policía alemana contra las personas que se reunieron a primera hora de la mañana en la famosa Oranienplatz de Berlín no consiguieron su objetivo. Condenamos la cooperación con el régimen turco, que está alimentando la guerra en Oriente Próximo, llevando a cabo masacres en el Kurdistán y organizando a mercenarios del ISIS. Con la prohibición del PKK, el Estado alemán está aplicando las exigencias del Estado turco. El Estado alemán debería apartarse de este error, escuchar las justas demandas del pueblo kurdo y abandonar su política de criminalización."

Según KON-MED, en Alemania viven un millón y medio de kurdos, y miles de ellos "hicieron una declaración de intenciones y condenaron la prohibición" el 18 de noviembre.

La organización paraguas kurda da las gracias a todos y a todas los que contribuyeron al éxito de este acto.

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