La Oficina de Inmigración y Refugiados ha tomado una decisión escandalosa sobre el refugiado kurdo Idris Isen, que pidió asilo en Alemania el año pasado.
Las unidades de seguridad fueron a su piso y le dijeron que era buscado por la Interpol y que sería arrestado si abandonaba Alemania.
Idris Isen iba a ser condenado a 6 años y medio de prisión por su lucha democrática durante sus años universitarios en Turquía. Buscó refugio en el sur de Kurdistán en 2011 después de que el Tribunal Supremo confirmara su sentencia. Isen, que ha trabajado como ingeniero civil durante muchos años en el Kurdistán del Sur, sufrió las presiones y el acoso que el KDP ejerce contra el pueblo del Kurdistán del Norte desde 2018. Para huir del acoso, fue a Alemania y solicitó asilo el año pasado.
La Agencia de Inmigración y Refugiados (BAMF) examinó la solicitud de asilo de Isen, que sigue en un campamento de refugiados en el Estado de Renania del Norte-Westfalia, y rechazó su petición.
ANF ha podido ver el fallo de 18 páginas de la BAMF que contiene elogios al régimen de Erdogan y afirma que Turquía es un estado de derecho. A raíz del fallo turco, la BAMF alegó que Isen fue condenado a prisión por "pertenencia a una organización terrorista" y que, por lo tanto, no tenía derecho a que se le concediera asilo.
Sugiriendo que Isen tuvo un juicio justo en Turquía, el BAMF afirmó que podía ser enviado allí. En la resolución también se alegaba que, según su información, no hay tortura sistemática en Turquía y que el sistema penitenciario está en consonancia con las normas de la Unión Europea.
Reaccionando a la decisión de la Agencia Alemana de Inmigración y Refugiados, Isen dijo: "Tuve que dejar el Kurdistán debido a las presiones del KDP, y ahora me enfrento a una decisión ilegal en Alemania."