En la conferencia participaron el ex diputado del HDP por Şırnak Faysal Saryıldız, la integrante del Movimiento de Mujeres Kurdas Sultan Toptaş y el portavoz europeo del HDP, Eyüp Doru.
Faisal Sariyildiz describió la situación de los derechos humanos en Turquía desde los años 90. Sariyildiz subrayó que la crisis actual en Oriente Medio se ha profundizado con el trabajo conjunto de Turquía y los grupos salafistas.
Hablando de su propia experiencia de represión, Sariyildiz subrayó que, especialmente desde el 7 de junio de 2015, los ataques contra políticos elegidos democráticamente han aumentado.
A las ciudades se les impusieron toques de queda, recordó el ex diputado del HDP, y decenas de personas murieron a manos de las fuerzas de seguridad, como en el caso de los asedios de Cizre y Sur.
Sariyildiz también defendió que, tras el intento de golpe militar, el régimen ha atacado a periodistas, activistas de derechos humanos y académicos. Señaló que se habían violado las leyes internacionales de derechos humanos y el derecho humanitario de Turquía.
"La respuesta de la población a la crisis quedó demostrada en las recientes elecciones locales. - dijo el ex diputado - Esto revela la necesidad de una voluntad política y un programa diferente. En este punto, la política de tercera vía del HDP adquiere relevancia. Todos pueden expresarse libremente, seguiremos luchando por una Turquía democrática".
Describiendo la situación en las cárceles de Turquía, Toptaş, del Movimiento de Mujeres Kurdas, comenzó su discurso recordando su propia experiencia en la cárcel. Estuvo en prisión durante 10 años. "Mientras que en 2002 fueron detenidas 59 mil 429 personas, este número se cuadruplicó en 2018. Y ahora el gobierno actual añadirá 53 más cárceles a las 384 ya existentes".
En las cárceles estatales de Turquía hay actualmente 334.000 presos, de los cuales 458 están en muy malas condiciones de salud. El año pasado murieron 40 prisioneros.
El portavoz europeo del HDP, Eyup, recordó que el HDP es el tercer partido más grande de Turquía. "El problema con el AKP y el régimen de Erdogan es que quieren deshacerse de la oposición. Así que consideran enemigo a cualquiera que se oponga a su política y siguen persiguiéndola".
Dora comentó también la decisión tomada por el Consejo de Europa y la Unión Europea y dijo que la ONU también debería tomar una decisión similar condenando a Turquía por ignorar la legislación internacional.
El portavoz de la AIDL y presidente de la conferencia, Ali Musa, condenó las graves violaciones de los derechos humanos que tienen lugar en Turquía y dijo que seguirían el proceso en Turquía.